La Junta de Supervisores del Condado de Los Ángeles celebrará su primera audiencia pública este miércoles sobre un presupuesto recomendado de 36,2 mil millones de dólares para el año fiscal 2021-22.

El plan enfatiza en el gasto para expandir los servicios de redes de seguridad, apoyar la recuperación económica y abordar las desigualdades raciales y de otro tipo.

La Directora Ejecutiva del Condado, Fesia  Davenport, ha ennumerado  las prioridades de la junta como el avance de la reforma de la equidad racial y el sistema de justicia, incluyendo el aumento del gasto en alternativas al encarcelamiento, así como la vivienda asequible, la lucha contra la falta de vivienda y el apoyo a los más afectados por la pandemia.

En abril, dijo a la junta: “Claramente, esta pandemia ha expuesto y aumentado enormes desigualdades entre los que tienen y los que no tienen, y la red de seguridad del condado fue llamada como nunca antes en los últimos 12 meses. Este presupuesto recomendado está comprometido a mantener estos esfuerzos usando una lente de equidad, al tiempo que nos posiciona para una recuperación que hace que el condado sea mejor que antes”.

Del presupuesto global, el 33% se recomienda financiar programas de salud, el 26% para asistencia pública, el 25% para protección pública y el 16% para cubrir otros costos, incluyendo recreación y cultura.

Se esperan ajustes importantes antes de que el presupuesto finalice finalmente en octubre. Por ejemplo, la última versión del presupuesto aún no incluye aproximadamente $1,9 mil millones en fondos federales que se espera fluyan al condado desde el paquete de alivio de coronavirus más reciente o cualquier financiamiento del plan de infraestructura que se está negociando actualmente en Washington, D.C.

Aproximadamente el 40% del presupuesto total del condado proviene de fondos federales y estatales.

Davenport dijo que presentará las recomendaciones de su oficina para asignar la última ronda aprobada de alivio federal a principios de junio y luego incorporar expectativas para los fondos estatales el 28 de junio.

Aunque las deliberaciones presupuestarias “finales” están programadas para junio, se realizarán una serie de adiciones y cambios hasta el 5 de octubre, cuando se ulte y apruebe un “presupuesto suplementario”.

Una partida presupuestaria que muchos defensores están presionando para aumentar es el compromiso del condado con la Medida J, un requisito de que al menos el 10% de los fondos generados localmente y sin restricciones se inviertan anualmente en programas comunitarios y alternativas al encarcelamiento, con un período de aumento de tres años.

Durante la primera presentación de las recomendaciones presupuestarias, Davenport destinó 100 millones de dólares en gastos en la Medida J como un “pago inicial” en la promesa del condado de abordar la injusticia racial.

“Esto representa la asignación más grande para un nuevo programa en este presupuesto recomendado”, dijo el director ejecutivo en abril.

El número presupuestado no va lo suficientemente lejos como para satisfacer a algunos defensores de la comunidad. Representantes de varias organizaciones que respaldaron la Medida J emitieron una declaración en abril “rechazando” la propuesta del director ejecutivo y argumentando que la asignación completa debería ser de hasta $900 millones.

La debida diligencia continúa estableciendo la retirada completa, y Davenport dijo que regresará a la junta con una recomendación en algún momento después de la aprobación del presupuesto de junio.

El presupuesto del Departamento del Sheriff es otro hueso de contención. Se recomienda mantenerse aproximadamente plano al año anterior, en 3,4 mil millones, lo que ha generado retroceso de aquellos que han pedido cambiar más dólares de las fuerzas del orden a los servicios y programas basados en la comunidad.

La supervisora Holly Mitchell pidió al director ejecutivo en abril que “continúe buscando oportunidades para eliminar las ineficiencias y el desperdicio en el Departamento del Sheriff” para crear un departamento “mejor diseñado para satisfacer las necesidades reales de nuestros residentes”.

El sheriff Alex Villanueva ha argumentado que la junta está matando  de hambre a su departamento de financiamiento y perjudicando a las comunidades de color en el proceso, señalando a tasas de criminalidad más altas y diciendo que es difícil financiar programas de capacitación laboral y educación en las cárceles del condado.

Abordar el creciente problema de la falta de vivienda, exacerbado por la pandemia, sigue siendo una preocupación central para la junta. El gasto destacado incluye un total de 426.7 millones en financiamiento de la Medida H, que incluye 16.6 millones adicionales para aumentar el stock de bonos interinos de vivienda y moteles, así como servicios de vivienda más favorables.

En su presentación prevista para el miércoles, la directora ejecutiva disparó un disparo de advertencia en relación con la demanda presentada contra el condado y la ciudad de Los Ángeles por la Alianza de Los Ángeles para los Derechos Humanos.

Dijo que la orden del juez, actualmente en apelación, para que el condado y la ciudad ofrezcan alojamiento a cada individuo sin hogar en skid row del centro de la ciudad para octubre podría costar al condado 448 millones y resultar en casi 2,000 despidos.

El presupuesto de este año se basa en una “línea de base más ajustada” de los recortes implementados el año pasado, incluida la eliminación de más de 2.500 puestos no cubiertos en los libros, pero recomienda que no haya despidos en ningún departamento. Sigue existiendo una dura congelación de la contratación de personal no esencial en todo el condado.

Los recortes a los departamentos que dependen de la financiación local suman 369 millones en comparación con el año pasado.

El director general dijo en abril que los departamentos presentaron 2.000 millones de dólares en solicitudes que no están incluidas en las recomendaciones, pero que las más críticas de esas solicitudes , que suman más de 500 millones de dólares, serían consideradas durante futuras deliberaciones.

Las supervisoras Janice Hahn y Kathryn Barger han expresado su apoyo a la idea del salario del héroe para algunos empleados del condado.

“Espero que en el futuro podamos ver el salario del héroe y cómo este condado puede, de hecho, agradecer a nuestros empleados por el trabajo que han hecho”, dijo Barger.

Barger también ha presionado para reservar dinero para el fondo del  lluvias del condado para prepararse para futuras crisis y emergencias, diciendo que las repercusiones económicas de la pandemia siguen siendo desconocidas.

“La demanda de servicios del condado, como alimentos, vivienda y atención de salud y salud mental, junto con el aumento del desempleo y la falta de vivienda, es asombrosa”, dijo Barger en un comunicado emitido después de la votación de abril sobre el presupuesto.

En la última presentación del CEO, Davenport destacó el compromiso de la junta con los principios de presupuestación conservadores y “vivir dentro de nuestros medios”.

El enfoque en la estabilidad a largo plazo fue subrayado por los grandes costos no financiados que Davenport sugirió que debían abordarse en los próximos cinco años, incluyendo mejoras a las instalaciones del condado y sistemas tecnológicos heredados.

Otro desafío incluye un estimado de 40,2 mil millones en pasivos de pensiones no financiados y compensación de trabajadores.