“Tres fuertes explosiones” han sacudido las afueras de Leópolis, en el oeste de Ucrania, pocas horas después de que Moscú asegurara que sus esfuerzos militares iban a centrarse en el Donbás. Leópolis, a 90 kilómetros de Polonia, es punto de partida de los refugiados para abandonar el país. Las alarmas antiaéreas han vuelto a sonar en la ciudad y el alcalde ha instado a sus vecinos a acudir lo antes posible a los refugios.

Toque de queda habitual en Kiev

Mientras, en Kiev, su alcalde, Vitali Klitschkó, ha anulado el toque de queda que debía durar todo el fin de semana. Sí se mantiene el toque de queda habitual, de ocho de la tarde a siete de la mañana.

La guerra en Ucrania protagonista en el Foro de Doha

Y el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, en una intervención por videoconferencia, acaparaba la atención en la inauguración del Foro de Doha con el siguiente mensaje a los productores de energía:

Diez corredores humanitarios

En cuanto a la situación sobre el terreno, el Gobierno de Ucrania ha informado del establecimiento de diez corredores humanitarios para evacuar a los civiles de las ciudades más afectadas por los bombardeos rusos.

Por su parte, el Ministerio de Defensa ruso emitía un vídeo, en medio de su incesante bombardeo a la ciudad portuaria de Mariúpol, de un ataque contra el sistema antimisiles ucraniano Buk, insistiendo en que sus ataques son solo sobre instalaciones militares.

“Pese a las dificultades, cumplimos la orden estatal de Defensa, según lo previsto. Avanzamos en el suministro de armas y equipos con ayuda de fondos crediticios. Las prioridades son las armas de alta precisión de largo alcance, equipos de aviación y el mantenimiento de la disponibilidad para el combate de las fuerzas nucleares estratégicas”, declaraba Serguéi Shoigú, ministro de Defensa de Rusia.

100.000 personas siguen atrapadas en Mariúpol

Mariúpol sigue siendo el epicentro de los combates. Según su alcade, la situación sigue siendo crítica, con combates callejeros en el centro.

Según las autoridades ucranianas, sólo pueden salir de la ciudad vehículos privados. Las tropas rusas impiden el paso de los autobuses. Unas 100.000 personas siguen atrapadas en Mariúpol.