Washington

Casi 750 migrantes han muerto en la frontera sur de EU este año fiscal, un récord que supera el total del año pasado en más de 200 personas, según cifras del Departamento de Seguridad Nacional (DHS).

Según información difundida por la cadena CNN, los migrantes a menudo enfrentan terrenos traicioneros al cruzar la frontera, incluido el calor opresivo del desierto, aguas peligrosas y caídas desde el muro fronterizo.

“Desde el 1 de octubre, que marca el inicio del año fiscal, ha habido 748 muertes. Eso supera las 557 muertes en la frontera suroeste durante el año fiscal 2021, el récord anterior”, señala el reporte de DHS.

Según analistas, las cifras no siempre registran todas las muertes, ya que otras agencias estatales y locales pueden recuperar cuerpos sin la participación de la Patrulla Fronteriza, lo que significa que la cantidad de muertes “probablemente sea mayor”.

La semana pasada, los cuerpos de al menos ocho migrantes que intentaban cruzar la frontera de Estados Unidos desde México fueron encontrados en el Río Grande, dijo la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza. Los restos fueron descubiertos por agentes y autoridades mexicanas mientras rescataban a otros migrantes en el río.

Un número cada vez mayor de migrantes continúa apareciendo en la frontera entre Estados Unidos y México a medida que las condiciones se deterioran en América Latina. Los arrestos de migrantes a lo largo de la frontera sur de EE.

En julio, la Patrulla Fronteriza de EU realizó más de 181.000 arrestos, según los últimos datos disponibles de la agencia.

En el pasado, “muchas muertes de migrantes han estado relacionadas con la exposición al calor”, según la Patrulla Fronteriza.

Los defensores de los inmigrantes dicen que pueden verse obligados a tomar caminos cada vez más riesgosos para llegar a los EU citando políticas fronterizas como una restricción de emergencia pandémica de la era Trump que permite a las autoridades rechazar a las personas en la frontera.

“Los migrantes, refugiados y familias enteras están utilizando rutas más distantes y peligrosas para venir a los Estados Unidos”, dijo Fernando García, director ejecutivo de la Red Fronteriza por los Derechos Humanos.