Ciudad de México

Con mariachis, música de banda, altares y rezos fueron recibidos en Veracruz, estado de México, Guanajuato, Oaxaca, Querétaro y Zacatecas los restos de al menos 16 de los 26 migrantes que perecieron el pasado 27 de junio tras haber sido abandonados dentro de la caja de un tractocamión en San Antonio, Texas.

Los cuerpos de los hermanos Jair y Yovany Valencia Olivares, así como de su primo Misael Olivares Jiménez llegaron a las 23:40 horas del miércoles a San Marcos Atexquilapan, en el municipio de Naolinco, Veracruz, de donde eran originarios.

Familiares y amigos los esperaban a la entrada del pueblo para escoltarlos, en medio de cantos religiosos, hasta su casa, donde los esperaba un altar en el que sobresalían sus fotografías, balones de futbol y cruces de madera.

Somos un pueblo unido, que se apoya tanto en las fiestas, como en el dolor y aquí estamos acompañando a los deudos de Jair, Yovany y Misael, manifestó uno de los asistentes.

Tres jóvenes zapateros en busca de un mejor futuro

Meses atrás los tres jóvenes, de entre 16 y 19 años, se cansaron de elaborar zapatos en el taller familiar y comenzaron a hablar de irse a Estados Unidos. Después de tres meses de labor de convencimiento, obtuvieron el permiso de sus padres para emprender la travesía; éstos reunieron 200 mil pesos por cada uno y les pagaron el viaje.

El plan de los muchachos era reunirse con unos parientes en Houston, Texas, conseguir algún trabajo en el sector de la construcción y juntar dinero para apoyar a sus seres queridos, quienes han tenido problemas económicos a partir de que comenzó la pandemia de covid-19.

Sin embargo, las alertas entre sus allegados se encendieron el lunes 27 de junio, cuando dejaron de recibir mensajes de ellos y se supo del hallazgo de un tráiler en San Antonio Texas, con 53 migrantes muertos, 26 de los cuales eran mexicanos.

“Se fueron con muchos sueños y metas que no realizaron”, musitaban ayer los amigos y familiares de los migrantes muertos.

En Hueypoxtla, estado de México, el féretro de Daniel Santillán fue llevado temprano por sus familiares por las calles del poblado para llegar, primero, a la parroquia de La Asunción, donde se ofició una misa de cuerpo presente y, luego, al cementerio municipal.

Padre de una niña de dos años y un niño de ocho, Daniel salió de su hogar hacia el vecino país del norte con la intención de obtener mayores ingresos; sin embargo, ayer fue despedido con un cortejo que estuvo acompañado de música mexicana, la cual se escuchó desde una bocina colocada en un vehículo que avanzó con los dolientes.

Mientras, el cadáver de Juan, oriundo del municipio mexiquense de Nextlalpan, fue trasladado al que era su domicilio, ubicado en calle La Barca en la comunidad de Fracción XVII Pozos y Vías, donde fue recibido con mariachis; fue sepultado el pasado viernes en el panteón de Prados de San Francisco.

El cuerpo de Josué Díaz Gallardo, originario de Santa María Tlahuitoltepec, Oaxaca, arribó a este poblado la madrugada de ayer; sus familiares señalaron que estos días de espera fueron muy dolorosos para todos.

Los restos de Javier Flores López también llegaron ayer a dicho estado; fueron trasladados a San Miguel Huautla, localidad en la región de la Mixteca, de donde partió junto con su primo José Luis Vásquez Guzmán, quien sobrevivió a la tragedia y se recupera.

Junto con ellos viajó Marcos, oriundo de San Miguel; desde hacía algunos años vivía en la Ciudad de México y sus restos mortales regresarán a su pueblo natal.

El cadáver del oaxaqueño Mariano Santiago Hipólito, originario de San Felipe Usila, en la región de la Cuenca del Papaloapan, será entregado a su familia, con la que vivía en San Juan Bautista Tuxtepec.

A Celaya, Cortazar y Valle de Santiago, en Guanajuato, arribaron el miércoles cuatro de los migrantes fallecidos y ayer se esperaba a otros tres, informó la secretaria de Gobierno estatal, Libia García Muñoz Ledo.

Detalló que el gobierno del estado cubrirá los gastos funerarios y analiza las necesidades de las familias para otorgarles ayuda, seguramente becas, apoyos alimentarios; revisaremos con ellos, anticipó.

Asimismo, parientes de Marcial Trejo Hernández le dieron el último adiós en el municipio de Pinal de Amoles, Querétaro; su viuda, María Guadalupe, narró que su esposo partió hacia Estados Unidos para aumentar sus ingresos y pagar los 15 años de su hija Yamilet.

En Zacatecas ya fueron entregados por las autoridades los restos de Francisco, Mayra y Fernando en la comunidad de Estancia de Ánimas, municipio de Villa González Ortega.

El cuerpo del chiapaneco Julio López López, de 32 años, llegó la tarde de este jueves a Toluca, estado de México, informó el Instituto Nacional de Migración (INM).

Según sus allegados, será llevado a la localidad de Rodulfo Figueroa, perteneciente al municipio de La Trinitaria, de donde era originario; antes de partir a territorio estadunidense vivió por cinco años con su pareja sentimental, Adriana Guadalupe González, en el poblado de Benito Juárez, en La Concordia.

En el vehículo también fue encontrada muerta una chiapaneca identificada como Elizabeth Ramírez García, de 23 años, egresada de la carrera de ciencias de la educación en la Universidad Valle del Grijalva, procedente de la comunidad Río Grande, municipio de Frontera Comalapa, pero hasta anoche nada se sabía sobre el arribo de sus restos.

La Secretaría de Gobernación, por medio del INM y en coordinación con las secretarías de la Defensa Nacional y de Relaciones Exteriores, dio a conocer que ya fueron realizados tres vuelos de repatriación de los connacionales fallecidos; hasta ayer habían sido enviados 23 féretros.

El viernes se realizó el último viaje en el que se transportaron los dos cuerpos restantes de 25 personas que murieron en Texas.

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