El condado de Los Angeles pasó los 5.000 muertos de COVID-19. La directora de salud pública del condado, Barbara Ferrer, lo calificó como un “hito trágico” .

“Esto es desgarrador y nos recuerda el costo humano de esta pandemia”, dijo Ferrer en un comunicado.

En California, ya hay 586 mil 430 infectados y 10 mil 656 defunciones.

El condado anunció 63 muertes el martes, aumentando el número de muertes en el condado desde que la pandemia comenzó a 5.057. Long Beach reportó una muerte adicional el martes, elevando el número de muertos en todo el condado a 5.058.

Ferrer señaló que una de las nuevas muertes reportadas el martes era una persona menor de 29 años.

“Esto es un recordatorio de que el riesgo para todos nosotros es real y que no importa lo joven que seas, este virus puede ser la fecha límite”, dijo.

Agregó:

“Debemos seguir adoptando prácticas que frenen la propagación de este virus. Esto nos permite prevenir estas muertes prematuras. Por favor, practique el distanciamiento físico, use una cubierta facial, lávese las manos y evite reunirse con personas con las que no vive”.

El condado también reportó otros 1.440 casos del virus, señalando que la cifra es inusualmente baja debido a la falta de informes de uno de los laboratorios de pruebas más grandes. El número tampoco incluye los casos que fueron atrapados en un trabajo pendiente en el sistema de informes electrónicos del estado. Long Beach añadió 331 nuevos casos el martes, diciendo que las cifras incluyen algunos casos atrasados del estado.

Los nuevos casos aumentaron el total del condado desde el inicio de la pandemia a 212.139.

Según el Departamento de Salud Pública del condado, había 1.524 personas hospitalizadas debido al virus hasta el martes, el nivel más bajo que ha alcanzado en semanas. El abandono de las cifras de hospitalización ha llevado a Ferrer y a otros funcionarios de salud a expresar un optimismo cauteloso en los últimos días de que el condado empezaba a dar la vuelta en los esfuerzos por controlar la propagación del virus.

El condado espera recibir datos actualizados del estado en los próximos días gracias a la resolución del retraso en los informes de casos del estado. Ese fallo tecnológico se extendió unas dos semanas y afectó a los resultados de aproximadamente 300.000 pruebas.

Funcionarios estatales dijeron que el lunes los casos atrasados han sido contados y serán reportados esta semana a los condados, que tendrán que procesar las cifras, lo que potencialmente resultará en un fuerte repunte repentino en los números de caso acumulativos. Pero los funcionarios del condado han subrayado que el atraso no afectó la notificación de pacientes hospitalizados o muertes.

Ferrer dijo que las hospitalizaciones del lunes han sido un promedio de alrededor de 1.600 por día en la última semana, frente a 1.900 la semana pasada y más de 2.000 en julio. Las muertes, por su parte, han promediado alrededor de 37 por día durante la semana pasada.

Pero volvió a subrayar que las tendencias positivas no significan que la pandemia haya terminado o que la gente pueda bajar la guardia.