A una semana de la elección federal del 1 de julio, el Partido de la Revolución Democrática enfrenta una nueva ola de renuncias y hasta el corrimiento de una “tribu” entera hacia Andrés Manuel López Obrador, candidato a la Presidencia de la República de la coalición “Juntos Haremos Historia”, por considerar incompatible al abanderado de su partido, el panista Ricardo Anaya Cortés, con la ideología de la militancia perredista.

Pero después del domingo, si el político tabasqueño gana, el Sol Azteca enfrentará una “encrucijada”: decidir si se convierte en un partido de oposición o si coadyuva con un Gobierno de izquierda, dice Alejandro Sánchez Camacho, secretario de Acción Política Estratégica del parido y coordinador de Izquierda Democrática Nacional.

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A una semana de la elección del 1 de julio el Partido de la Revolución Democrática (PRD) entró en una nueva crisis entre sus liderazgos y la sangría se profundiza.

Apenas unos días después de que Vladimir Aguilar García, secretario de Operación Política del PRD, asegurara que los candidatos de la coalición “Por México al Frente” a la Presidencia de la República Ricardo Anaya Cortés y a la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México Alejandra Barrales Magdaleno perderían los comicios, Amalia García Medina, ex Gobernadora de Zacatecas y ex presidenta nacional del Sol Azteca presentó su renuncia al partido.

Y hoy durante la mañana Alejandro Sánchez Camacho, secretario de Acción Política Estratégica del PRD y coordinador de la corriente Izquierda Democrática Nacional (IDN), anunció que la expresión que cuenta con el 10 por ciento de los consejeros del Consejo Nacional del PRD (alrededor de 30) y que logró 200 candidaturas a nivel nacional para el proceso electoral actual apoyará a Andrés Manuel López Obrador, candidato de la alianza “Juntos haremos historia” a la Presidencia de la República.

Los militantes perredistas de IDN, la “tribu” que fundó y lideró hasta hace unos meses René Bejarano Martínez, le dieron la espalda a Ricardo Anaya Cortés por considerarlo un candidato incompatible con su ideología.

“Desde un principio en los consejos nacionales de septiembre de 2017 y en el de febrero de este año, IDN votó en contra de la alianza con el PAN [Partido Acción Nacional] y después de la candidatura de Ricardo Anaya otorgamos el beneficio de la duda, pero ha quedado claro que fue un error catastrófico aliarse con el PAN y en particular la candidatura de Anaya”, dijo Alejandro Sánchez Camacho en una entrevista con SinEmbargo.

La división a nivel de las bases del Sol Azteca es tal, que el domingo habrá perredistas en las casillas cuidando el voto de López Obrador, adelantó.

“La estructura electoral normalmente se construye con los militantes más convencidos, pero no dudamos que llegue hasta impactar en la estructura estas decisiones de apoyar a Andrés Manuel. El resultado puede tener muchos matices, porque habrá representantes de casilla que apoyen a un candidato del Frente local, pero para la Presidencia a López Obrador. Habrá compañeros que le echen un ojo a los votos del PRD y el otro a los votos de Obrador”, dijo.

La decisión de alianza con el PAN y la candidatura de Ricardo Anaya se tomó a nivel cupular y sin el “visto bueno” de la militancia y las bases de un partido ideológicamente de izquierda, lo que ocasionó que muchos perredistas no hicieran suya la candidatura de su abanderado, explicó.

“Se generó un divorcio entre las decisiones a nivel de la dirección nacional y el sentimiento de la militancia. Algunos líderes de las corrientes al interior del PRD olvidaron que el corazón de la militancia es para la izquierda y nunca ha estado a la derecha”, dijo Sánchez Camacho.

El secretario de  Acción Política Estratégica agregó que en los estados hay liderazgos locales que se han decantado por Andrés Manuel López Obrador.

Incluso, afirmó, liderazgos que pertenecen a la corriente Nueva Izquierda (NI) o “Los Chuchos” y a Alternativa Democrática Nacional (ADN)– las dos corrientes más fuertes del partido y cuyos líderes nacionales negociaron e impulsaron la alianza con el blanquiazul y la candidatura de Ricardo Anaya–han renunciado y se han sumado al proyecto de López Obrador.

“No hay identidad con el proyecto de Nación del PAN, son aspiraciones muy distintas en materia de petróleo, en el tema de derechos humanos, diversidad sexual y derechos de la mujer. No coincidimos en lo laboral, esa Ley que ellos votaron”, argumentó.

Sánchez Camacho recordó que cuando Anaya Cortés fue Diputado federal se convirtió en uno de los principales artífices de la Reforma Energética.

“No hay forma de cómo aceptar a un abanderado de esa naturaleza, además de que Anaya trae una acusación por lavado de dinero, un asunto de corrupción que ha lastimado a la Nación entera”, dijo.

LA RENUNCIA DE AMALIA

Las declaraciones de Sánchez Camacho se dan en el marco de renuncias y afirmaciones contrarias a la dirección del partido de otros liderazgos.

Vladimir Aguilar aseguró la semana pasada que los candidatos frentistas Anaya Cortés y Barrales Magdaleno ya perdieron la elección, pues en su afán por ser los abanderados del Frente fracturaron al PAN y al PRD.

“El principal error es que formaron el Frente para ser candidatos y fracturaron a sus partidos [al PAN y al PRD], generaron conflictos, exclusiones y ahora todo eso está reflejando los costos. Ahí están todas las encuestas”, dijo Aguilar García a este medio hace unos días.

El perredista consideró que Miguel Ángel Mancera Espinosa también pactó con el PAN y abandonó la candidatura que hubiera sido más competitiva para la militancia.

“Por eso se inconformó Silvano Aureoles, por eso surgió la candidatura de Margarita Zavala, el enojo de Rafael Moreno Valle, porque todos los procesos fueron excluyentes: unos poquitos del PAN, unos poquitos del PRD, eso les está pasando factura el día de hoy. Todavía se están litigando candidaturas a unos días de la elección”, afirmó.

En cuanto a las renuncias al partido, este fin de semana renunció Amalia García Medina, fundadora del PRD y ex presidenta nacional de la fuerza política.

La razón, dijo en su carta de renuncia dirigida Manuel Granados Covarrubias, dirigente nacional de la fuerza política, es porque el PRD perdió los “objetivos y valores que le dieron autoridad y cohesión”.

“Siendo sustituidos por intereses que tienen que ver con el beneficio personal. Que el gran debate de ideas que constituía una de sus fortalezas, ha sido sustituido totalmente por acuerdos para el reparto de cuotas”, escribió.

La ex Gobernadora de Zacatecas también atribuyó su renuncia a que para ella es inadmisible apoyar la candidatura de Ricardo Anaya Cortés, uno de los principales impulsores de la Reforma Energética.

“Me resulta inadmisible que se propongan construir un Gobierno con quien fue partícipe relevante en ese golpe a nuestro país y que su participación no haya sido parte del análisis en el momento de la decisión sobre la candidatura a la Presidencia de la República”, argumentó en la misiva firmada el 21 de junio.

Antes de su renuncia Amalia García ya había anunciado su apoyo a Claudia Sheinbaum Pardo, candidata a la Jefatura de Gobierno de la capital del país por el partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena).

PRD: OPOSICIÓN O ALIADO DE AMLO

Los miembros de la corriente IDN no se van del partido por lo pronto, pero luego de la elección de este domingo el partido debe tomar una decisión crucial, dijo Alejandro Sánchez Camacho.

“Si gana López Obrador será una encrucijada: ser un partido de oposición o un partido coadyuvante con un Gobierno de izquierda. Ese es el reto”, consideró.

Sánchez Camacho afirmó que el PRD debe plantearse una refundación y pasadas las elecciones del 1 de julio debe llamar a un Congreso Nacional para definir el rumbo de la fuerza política.

La corriente IDN se ha manifestado en contra de las alianzas con el PAN en las elecciones de otros años. En 2012 sus miembros y líderes estuvieron en contra de que el Sol Azteca firmara el Pacto por México con Acción Nacional, con el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y el Gobierno federal. Su dirigente, René Bejarano y su esposa Dolores Padierna Luna renunciaron al partido en septiembre de 2017 para sumarse a la campaña de Andrés Manuel López Obrador.

Vladimir Aguilar hizo un llamado la semana pasada al partido donde todavía milita y al que, aseguró, no piensa renunciar: llamó al Sol Azteca y a sus dirigentes a aceptar la derrota y los resultados del 1 de julio.

“El PRD necesita transformarse o morir, no puede ser presa de una posición de dos, tres corrientes, es democratizar al partido, asumir un actitud responsable ante los resultados de la elección. Es renovarse o morir”, dijo.