El FBI alertó a las autoridades de Chicago (Illinois, EE.UU.) sobre una potencial amenaza por parte de una treintena de pandillas que operan en las calles de esa ciudad, cuyos miembros habrían acordado disparar “contra cualquier policía que apunte con un arma a cualquier sujeto en público”, informa el canal ABC7.

En un informe que remitieron el pasado 26 de agosto, los integrantes del FBI indicaron que esos pandilleros ya buscan y filman a agentes de servicio para grabarles cuando saquen sus armas y abran fuego contra sospechosos, con la intención de difundir esos videos y atraer la atención de los medios.

La persona que proporcionó esta pista es “un contacto cuya información es limitada y su fiabilidad no se puede determinar”, con lo cual podría ser una fuente que los oficiales tienen en las calles, un testigo que coopera en un caso o fruto de escuchas de conversaciones telefónicas o por motivos de vigilancia.

Entre las bandas que forman parte del pacto se encuentran los Latin Kings y otros colectivos que operan en Chicago desde hace medio siglo, así que el superintendente de la Policía de esa ciudad, David Brown, sostiene que se trata de una amenaza real porque “buscan hacer daño” a los agentes.

Los agentes están al tanto del peligro que corren y sus superiores tomarán las medidas necesarias para protegerles, pero el pasado fin de semana en Chicago fueron baleadas 54 personas, incluidos dos policías que se espera que sobrevivan, mientras que 10 de esas víctimas fallecieron.