Ciudad de México. 

La meta de llegar a 2020 con 90 por ciento de cobertura en los diagnósticos de personas que viven con VIH, que tienen acceso a tratamiento y mantienen bajo control la enfermedad (90-90-90) tiene avances desiguales. Mientras en Inglaterra los indicadores ya están en 95 por ciento, en México, 79 por ciento conoce su estatus, 72 por ciento está en tratamiento antirretroviral y 55 por ciento ha logrado controlar la enfermedad.

Alethse de la Torre Rosas, directora del Centro Nacional para la Prevención y Control del VIH/sida, explicó que, de acuerdo con estimaciones de un modelo desarrollado por Onusida, en México 230 mil individuos viven con la infección, de ellos 182 mil 498 lo saben, mientras 164 mil 518 tienen medicamentos.

Según el último reporte del Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/sida (Onusida), a escala mundial los porcentajes están por debajo del objetivo: el 75 por ciento de quienes viven con el virus saben su condición, 79 por ciento ha tenido acceso a los medicamentos y 81 por ciento suprimió su carga viral. Otros sitios que han alcanzado la meta de 90 por ciento son Botswana, Camboya, Dinamarca y Países Bajos.

Shannon Hader, directora ejecutiva adjunta Onusida, señaló que hay mayor progreso para reducir la mortalidad relacionada con la infección; en cambio, el avance para bajar el índice de VIH entre jóvenes y adultos ha sido lento e insuficiente.

Destacó el fracaso en la disponibilidad de los recursos económicos para combatir la epidemia y recordó a los líderes políticos del mundo: el tiempo se acaba y ustedes son necesarios para expandir proactivamente los servicios.

En el caso de México, De la Torre Rosas indicó que el avance ha sido progresivo y lo más importante es seguir impulsando la prevención y tener un diagnóstico temprano. Queremos prevenir infecciones e identificar lo más pronto posible a las personas que viven con VIH porque si ofreces un tratamiento, su calidad de vida no se modifica y se reducen todos los riesgos que pueden tener.

La funcionaria subrayó el trabajo conjunto que se ha tenido con líderes clínicos, investigadores, activistas y las secretarías de Salud y Hacienda para mejorar los tratamientos de los pacientes, en este caso con la compra de medicamentos antirretrovirales que son altamente efectivos, seguros e innovadores.