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Alto a la nueva e inhumana política de Trump de separar a niños inmigrantes acompañados de sus padres, exigió el gremio magisterial de California.

“Esta práctica desmesurada es antitética a los valores estadounidenses, a los valores familiares y a la decencia humana básica. El uso de terminología deshumanizante como “infestación” para describir a los inmigrantes y para justificar esta crueldad inimaginable también debe detenerse”, expresó Eric C. Heins, presidente de la Asociación de Maestros de California (CTA, siglas en inglés).

Dijo que desde mayo, más de 2,000 familias han sido destrozadas en la frontera con México, ya que han venido a Estados Unidos en busca de una vida mejor. Muchos de ellos han arriesgado un largo y peligroso viaje, a menudo huyendo de la opresión y la violencia que amenaza la vida en sus países de origen. Ahora están siendo traumatizados por esta práctica deliberadamente cruel. Estos niños y sus familias merecen algo mejor de una nación cuya historia de inmigrantes está simbolizada por la Estatua de la Libertad”.

Y resaltó:

“Nuestras políticas de inmigración deben basarse en la compasión, y todos aquellos que buscan ingresar a los Estados Unidos deben ser tratados con dignidad y respeto, independientemente de la disposición final de sus casos. Las políticas de inmigración basadas en la crueldad deliberada son contrarias a todo lo que representa América. Los educadores exigen que esas políticas se detengan y que todos los niños, independientemente de su estatus migratorio, sean tratados con sumo cuidado una vez que crucen nuestras fronteras. Ese cuidado comienza por mantener juntas a las familias “.

Heins  también pide al Congreso que actúe inmediatamente para proteger a los inmigrantes de la Acción Diferida para la Llegada Infantil (DACA) que fueron traídos aquí cuando eran niños y para quienes Estados Unidos es su hogar.