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El calentamiento global como arma de los antinmigrantes. Fiscal de Arizona, la muestra

November 22, 2021 - por

El calentamiento global como arma de los antinmigrantes. Fiscal de Arizona, la muestra

Foto: AFP.

Imagine usted, por un momento, que un líder político de extrema derecha agita el tema del calentamiento global para exigir el blindaje de las fronteras y evitar que las corrientes migratorias que huyen del cataclismo político o natural, desaten el caos y el hundimiento de la nación.

Pues bien, ya no hay necesidad de imaginarlo porque la primer pieza de esta estrategia ya ha sido puesta en marcha en el estado fronterizo de Arizona, donde el fiscal general republicano, Mark Brnovich, ha exigido la construcción de un muro fronterizo para evitar el ingreso de los migrantes desde México, ya que estas personas “resultan directamente nocivas en la liberación de contaminantes, dióxido de carbono y otros gases de efecto invernadero a la atmósfera”.

“Los migrantes (como todos los demás) necesitan vivienda, infraestructura, hospitales y escuelas”, se lee en la demanda.

“Conducen automóviles, compran bienes y usan parques públicos y otras instalaciones. Sus acciones también resultan directamente en la liberación de contaminantes, dióxido de carbono y otros gases de efecto invernadero lo que afecta directamente la calidad del aire ”.

Empecinados adversarios del movimiento ecologista, los movimientos de extrema derecha y nativistas voltean hoy la mirada hacia la crisis del calentamiento global para convertirla en su nueva arma contra el éxodo migratorio que apura de sur a norte, principalmente a través de la frontera entre México y EU.

Las imágenes del pasado mes de octubre, cuando agentes de la patrulla fronteriza atajaban el paso de refugiados haitianos al galope de sus caballos en el Río Bravo, dejaron tras de sí una impronta de terror y brutalidad contra aquellos que, en opinión de un creciente sector de la extrema derecha, buscan “el colapso de Estados Unidos”.

Ellos son los que, en opinión del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, construyen los “mitos y prejuicios” contra los migrantes que buscan un futuro mejor en Estados Unidos.

Pero el estigma de bárbaros y destructores que hoy intenta endilgar la extrema derecha de EU a los migrantes, no es exclusiva de América del Norte.

Según consignó recientemente el diario The Guardian, el primer ministro Boris Johnson aprovecho su reciente estancia en Roma para asegurar que la caída del Imperio romano coincidió con la crisis del medio ambiente y el descontrolado avance de hordas de migrantes:

“Cuando cayó el imperio romano, fue en gran parte como resultado de la inmigración descontrolada: el imperio ya no podía controlar sus fronteras, la gente venía del este y de todas partes y así entramos en los tiempos oscuros de la edad Media”, aseguró Boris Johnson en una entrevista.

A pesar de que son legión los autores e historiadores que contradicen esta visión catastrofista de Boris Johnson, la narrativa le ha permitido al premier británico extender la versión entre la extrema derecha y los nativistas de todo el mundo de que, toda era de transformación o transición (como la que hoy vivimos) viene acompañada por una serie de calamidades, causadas por el debilitamiento de la moral de un imperio moribundo que fue derribado por hordas de invasores.

Esta narrativa ha cundido en distintas partes de Europa, con movimientos como Vox en España o en el Frente Nacional de Jean Marie Le Pen en Francia. Pero, el lugar donde el éxodo continuo de migrantes y refugiados le ha imprimido un carácter más urgente es en Estados Unidos, donde organizaciones como la Negative Population Growth (NPG), se han pronunciado a favor del reforzamiento de la frontera con México, la deportación de los inmigrantes indocumentados y la drástica reducción en hasta un 80% de los migrantes en EU.

“Hay tres corrientes que interactúan en la inmigración masiva actual: inmigrantes ilegales e inmigrantes “cuasi legales” (o “temporales” ficticios). Todos traen gente por mucho tiempo o estancias permanentes, agregándolas a la base de población consumidora de recursos de la nación.

“Esta nueva corriente de migrantes compiten por puestos de trabajo, en particular con los residentes menos calificados. Todos estos flujos no están regidos o gobernados por límites numéricos efectivos o por una gestión integral racional.

“Por ello, NPG aboga por la eliminación completa de la inmigración ilegal y cuasi legal y la reducción de inmigración legal actual en un 80 por ciento”, asegura la organización.

La estrategia de aferrarse a la nostalgia de un pasado imperial como el de Roma, parece estar así detrás de esta estrategia que en opinión de algunos historiadores, no sólo es falsa, sino peligrosa:

“La imagen de hordas de bárbaros que destruyen el imperio es un tópico fundamentalmente racista. Estas son fantasías apocalípticas de derecha sobre los extranjeros que acechan más allá de las fronteras (siempre difíciles de definir) de la nebulosa civilización occidental, lista para reemplazar a los verdaderos occidentales.

“Satisfacer estas fantasías y avivar el odio que alimentan no solo es irresponsable, es absolutamente peligroso”, aseguró el historiador alemán, Mateusz Fafinski, en un reciente artículo publicado en Foreign Policy.