Por primera vez en California estalló una huelga en el sector de las escuelas charter.

Se trata decuatro planteles de la firma  The Accelerated Schools (TAS), en Los Angeles.

Los mil maestros paristas forman parte del Sindicato de Maestros de Los Angeles (UTLA, siglas en inglés), que un día antes había iniciado una huelga en las escuelas del distrito escolar angelino.

A nivel nacional, es la segunda vez que los instructores de una organización de escuelas charter se declararon en huelga.

Hace cuatro días, un paro se inició en la red de escuelas charter de Acero en Chicago.

Los representantes sindicales de maestros en The Accelerated Schools dijeron que más de un año y medio de negociaciones con la administración escolar no lograron un contrato.

En una conferencia de prensa matutina, los maestros y sus partidarios cantaron y saludaron carteles afuera del campus de Accelerated en el bulevar Martin Luther King Jr.

Fundadas por dos antiguos maestros del Distrito de Los Ángeles, las tres escuelas aceleradas atienden a 1,700 estudiantes desde el jardín de infantes hasta el 12º grado.

Según información propia, la cadena TAS comprende cuatro escuelas de Los Ángeles: el Centro de Educación Temprana Keck, la Escuela elemental ACES, la Escuela TAS K-8 y la Preparatoria Wallis Annenberg.

Mientras los autos que pasaban tocaban la bocina de apoyo, los maestros se pararon en la acera y hablaron sobre la rotación constante en Accelerated. Entre 2016 y 2018, hubo una tasa de rotación del 50% entre los maestros de la escuela, dijo el sindicato.

“Los maestros se van y encuentran mejores oportunidades en otros sitios”, dijo la maestra de primer grado Kari Rivera.

UTLA representa a más de 75 maestros en Accelerated. Casi todos los maestros se quedaron fuera del trabajo el martes, dijo Hong Bui, el principal negociador del sindicato con Accelerated.

El punto muerto de UTLA con LAUSD se centra en el tamaño de las clases y la expansión de las escuelas autónomas. El martes, los manifestantes fuera de Accelerated plantearon los mismos puntos. Bui dijo que las negociaciones del contrato se rompieron por otros criterios, incluido el arbitraje obligatorio en el procedimiento de reclamos, la seguridad laboral y los beneficios de salud.

Randi Weingarten, presidente de la Federación Americana de Maestros, se unió a los piqueteros fuera de la escuela. Dijo que la administración de la escuela autónoma ha “puesto fin al sistema de estatutos y lo ha hecho ideológicamente contra los maestros, contra los padres, contra la comunidad”.

“Los maestros no son widgets, los niños no son puntajes de exámenes. Y necesitamos tener maestros que sean personas estables y estables en la vida de los niños “, dijo Weingarten. “Para que sepan año tras año, pueden contar con maestros en la escuela.

“Estas son cosas que son básicas para la educación. Francamente, estas son cosas que todo padre de clase media o rica exige de las escuelas a las que asisten sus hijos “.

Alex Caputo-Pearl, presidente de UTLA, marchó con los maestros y dijo a los periodistas que las dos disputas laborales tienen similitudes.

“La administración Accelerated tiene dinero para atender los problemas que están sobre la mesa”, dijo. “También en común, es que la gestión está siendo impulsada por la ideología, considerando a los maestros como desechables y no como indispensables. ”

Dijo que esta es “una semana histórica para los educadores y para la educación pública en Los Ángeles”.

La profesora de español de secundaria Ashley Avilla dijo que estaba atacando en parte para protestar por el tamaño de sus clases en Accelerated, que por lo general tiene 38 estudiantes.

“Es difícil darles atención individual”, dijo.

VERSION DEL CEO DE ACCELERATED

El cofundador y CEO de Accelerated, Johnathan Williams, dijo en un comunicado que “Las escuelas aceleradas están descorazonadas de que el liderazgo de UTLA haya convocado una huelga, poniendo a nuestros estudiantes y familias en medio de las demandas contractuales”.

Su declaración dijo que el año pasado, el sindicato había acordado un contrato de tres años “para un aumento salarial significativo de más del 17%, que los maestros ahora disfrutan”.

También dijo que la propuesta pendiente de la escuela incluye $ 17,000 por año en cobertura de beneficios. El sindicato rechazó la última oferta de la escuela, “que incluía un proceso para que los maestros con evaluaciones sólidas de desempeño reciban un contrato garantizado de dos años con un bono de $ 2,000 al finalizar”, dijo Williams.