“Bajo la dirección del presidente Biden, las fuerzas militares estadounidenses llevaron a cabo ataques de autodefensa contra dos instalaciones en el este de Siria utilizadas por el Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán y grupos afiliados”, señaló Austin en un comunicado.

Según el jefe del ente castrense, se trata de una respuesta a “una serie de ataques en curso y en su mayoría sin éxito contra el personal de Estados Unidos en Irak y Siria por grupos de milicianos respaldados por Irán que comenzaron el 17 de octubre”.

Afirmó que los ataques estadounidenses no están relacionados con el conflicto palestino-israelí y acusó a Irán de estar detrás de los ataques contra el personal de Washington.

Si continúan los ataques contra las fuerzas estadounidenses, “no dudaremos en tomar otras medidas necesarias para proteger a nuestro pueblo”, advirtió.

Algunos legisladores de Estados Unidos, como Lindsay Graham, han dicho en días pasados que el Ejército estadounidense debe atacar objetivos en Irán como respuesta a los ataques llevados a cabo por el grupo armado palestino Hamás contra Israel el pasado 7 de octubre. Según el legislador, Teherán está detrás de dichas agresiones, aunque nunca ha ofrecido pruebas.