SAN JOSÉ

La oficina del Fiscal General entregó órdenes judiciales a la mitad de las diócesis católicas del estado como parte de su investigación sobre la manera en la que las iglesias de California manejaron durante las últimas dos décadas los casos de pederastia que involucraron a sus sacerdotes.

Las arquidiócesis de San Francisco y Los Ángeles, así como las diócesis de San José, Sacramento, Fresno y Orange recibieron el documento que las obliga a producir documentos sobre las instancias en las que miembros del clero incurrieron en abuso o acoso sexual de menores de edad.

Si bien las instituciones religiosas han cooperado con la Procuraduría estatal, el mandato firmado por un juez facilita que los líderes religiosos les entreguen a los fiscales documentos sobre los que existían dudas en torno a la violación de la privacidad.

“De alguna forma puede agilizar el proceso porque en ocasiones los archivos contienen registros médicos o información privada que impediría que pudieran ser entregados sin una orden judicial”, explicó un vocero la de Conferencia Católica de California al diario The Mercury News.

Aunque el fiscal Xavier Becerra no ha dejado claros los alcances que tendrá la investigación, los sobrevivientes de abusos sexuales por parte del clero han presionado para que la querella arroje resultados similares a la que se llevó a cabo en el estado de Pennsylvania, donde lograron documentar una cultura de abusos en las iglesias y un encubrimiento sistemático de las diócesis.

La Iglesia en EEUU ha publicado los nombres de por lo menos 1,000 sacerdotes y otros acusados de abusar sexualmente de niños en los últimos meses, según una investigación de la Associated Press.

Aunque la Iglesia ha sido históricamente reservada y más aún con las acusaciones en su contra, ahora 13 diócesis han contratado consultores externos, incluyendo agentes del FBI y ex jueces para revisar sus archivos, y las diócesis que se habían mantenido en secreto sobre los casos están coordinando para publicar listas a nivel estatal.

La agencia AP descubrió que cerca de 50 diócesis y órdenes religiosas han comenzado a identificar a muchos sacerdotes a raíz del informe de Pennsylvania publicado en 2018. Otras 55 diócesis más han anunciado planes para hacer lo mismo en los próximos meses. Juntas representan más de la mitad de las 187 diócesis de la nación.

Además, la AP encontró que casi 20 investigaciones locales, estatales o federales, ya sean penales o civiles, se han lanzado desde la publicación de los hallazgos del gran jurado. Esas investigaciones podrían llevar a más nombres y más acusaciones, así como multas contra diócesis y medidas de seguridad ordenadas por los tribunales. Varios fiscales generales de hasta 14 estados en el país le confirmaron a la agencia que también están llevando a cabo sus propias investigaciones.

Según una carta obtenida por la AP, el Vaticano había impedido que los obispos de EEUU tomaran medidas para abordar el escándalo de abuso sexual del clero porque los líderes de la iglesia de EEUU no discutieron sus propuestas, las cuales eran legalmente problemáticas, con la Santa Sede con suficiente antelación.

El Papa Francisco reconoció en una carta a sus obispos publicada este jueves que los númerosos escándalos y los esfuerzos por encubrirlos han dañado a la Iglesia. La carta sin embargo no ofrece ningún plan de acción para castigar a los curas pederastas, ni para prevenir más abusos. Es en cambio más una guía espiritual.