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Francia rendirá homenaje nacional a Belmondo el jueves próximo

September 7, 2021 - por

Francia rendirá homenaje nacional a Belmondo el jueves próximo

Inolvidable.

PARIS 

Francia rendirá un homenaje nacional el próximo jueves 9 de septiembre en el Palacio de los Inválidos de París a Jean-Paul Belmondo, anunció este martes el Elíseo, que dijo estar en contacto con la familia del actor para definir los detalles.

Tras el anuncio de la muerte de Belmondo, este lunes a los 88 años en su domicilio de la capital francesa, la ministra de Cultura, Roselyne Bachelot, ya había avanzado en declaraciones a la emisora RTL que el presidente, Emmanuel Macron, que no dudó en considerarlo un “tesoro nacional”, decidiría cómo se desarrollaría ese homenaje.

Fuentes próximas a Macron citadas por la emisora France Info insistieron en que los preparativos se están haciendo en asociación con miembros de la familia del actor, y en que la voluntad es que el homenaje tenga un carácter popular.

Entre las muchas declaraciones de dolor por la desaparición de Jean-Paul Belmondo está la del que fue compañero en muchos rodajes, el también actor Alain Delon, que este martes dijo en la emisora Europe 1 que está “roto”.

“Pierdo a un amigo, a un colega -añadió Delon-. Hace 60 años que nos conocíamos, 60 años que trabajábamos juntos, 60 años que estábamos tan cerca el uno del otro. Estoy conmocionado”.

La muerte de Jean-Paul Belmondo ocupaba este martes la mayor parte de las portadas de la prensa francesa y también estaba presente en las de periódicos de otros países.

“TODA FRANCIA ESTA TRISTE”

Jean-Paul Belmondo, una estrella indiscutida de la Nouvelle Vague del cine francés después de su impactante actuación en la película “Sin Aliento” de Jean-Luc Godard, en 1959, murió ayer a los 88 años.

“Me parece que toda Francia está triste”, dijo Michel Godest, abogado y amigo del actor, a BFM TV, entre lágrimas.

Belmondo, un carismático actor, pasó al cine convencional en la década de 1960 y se convirtió en uno de los principales héroes de comedia y acción de Francia.

Su decisión de seguir una carrera en el cine comercial y de alejarse del cine-arte le generó críticas de que había desperdiciado su indiscutible talento, algo que siempre negó.

“Cuando un actor tiene éxito, la gente le da la espalda y dice que ha tomado el camino más fácil, que no quiere esforzarse ni correr riesgos”, dijo Belmondo una vez.

“Pero si fuera tan fácil llenar los cines, entonces el mundo del cine estaría en mucho mejor estado de salud de lo que está. No creo que me hubiese mantenido en el foco durante tanto tiempo si hubiera estado haciendo cualquier basura antigua. La gente no es tan estúpida”, agregó.

El abogado de Belmondo dijo que falleció en su casa. “Había estado cansado durante un tiempo. Murió pacíficamente”, dijo Godest a AFP.

Belmondo nació el 9 de abril de 1933 en Neuilly-sur-Seine, hijo del renombrado escultor Paul Belmondo y la pintora Sarah Rainaud-Richard. A pesar de su formación culta, parecía más atraído por el mundo del deporte que por las artes y fue un gran boxeador en su juventud.

NO LE AUGURARON EXITO

Una vez que descubrió la actuación, hizo tres intentos antes de que el Conservatorio de París acordara aceptarlo como estudiante en 1952. Incluso en ese momento no fue fácil y Belmondo renunció en 1956 después de recibir una fría recepción por una de sus actuaciones por parte de un jurado del conservatorio.

Uno de sus profesores predijo en ese momento: “El señor Belmondo nunca tendrá éxito con su cara de gamberro”.

La respuesta de Belmondo fue un gesto obsceno. Y luego protagonizó más de 80 películas, muchas de ellas éxitos de taquilla, durante el siguiente medio siglo.

Belmondo primero recibió elogios por “Sois belle et tais-toi” en 1958 y en “A double tour” (“Una doble vida”) de Claude Chabrol en 1959, donde su magnetismo se robó la película.

Pero su papel como un canalla de poca monta que enamoraba a la estadounidense Jean Seberg en “Sin Aliento”, de Godard, lo lanzó al estrellato internacional.

El atractivo de Belmondo, una mezcla de cinismo y sensibilidad, calidez y tranquilidad, creó un nuevo tipo de romanticismo que le generó papeles en películas de directores franceses de la Nouvelle Vague como Francois Truffaut, Alain Resnais y Louis Malle.

“Si tengo un consejo para los actores jóvenes es que nunca descuiden la técnica: sin técnica, se limita la invención. Pero nunca debería mostrarse. Lo que cuenta es el resultado, no el sudor y el dolor que cuesta”, señaló en una oportunidad.