CIUDAD DE MEXICO

“Abrumado” se dijo el actor, director, escritor y músico Héctor Bonilla (Ciudad de México, 14 de marzo de 1939) con motivo del reconocimiento que la noche del miércoles le otorgó el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL), por su aportación al desarrollo de las artes en México. De hecho, la institución echó la casa por la ventana porque no faltó nada.

Con una trayectoria de 55 años, como actor Bonilla ha destacado en más de 140 obras de teatro y como director en más de 40 puestas en escena. Ha incursionado también en el cine y la televisión.

El Teatro del Bosque Julio Castillo fue el escenario para las palabras y muestras de cariño por parte de su esposa Sofía Álvarez y sus hijos Sergio y Fernando, así como de los amigos Susana Alexander, Patricio Castillo, Julieta Egurrola, Damián Alcázar y Mario Iván Martínez, quienes coincidieron en su congruencia y ética en todos los aspectos de su vida.

La titular del INBAL, Lucina Jiménez, aparte de entregarle el diploma, le obsequió un grabado de Rolando de la Rosa, en el que se ve la simbiosis de una figura prehispánica con la efigie de Emiliano Zapata, dado el gusto de Bonilla por la historia. Afirmó que en el homenajeado se vincula la estética con la ética.

Al término del acto un mariachi tocó una composición suya: Tierras rojas. En cierto momento el actor Jesús Ochoa le llevó una copa de bacanora, licor originario de Sonora, incluso, al referirse a la proyección que anunciaba el evento, dijo que el nombre de Héctor debería de cambiarse por el de “Actor”.

Bonilla expresó su beneplácito de que la ceremonia se haya llevado a cabo en el Teatro del Bosque Julio Castillo, a quien consideró “el director más creativo de la historia de este país”. Egresado de la Escuela Nacional de Arte Teatral del INBAL, recordó las distintas obras en que ha actuado en los diferentes teatros del Centro Cultural del Bosque.

Manifestó su preocupación en el sentido de que los actores de teatro puedan cotizarse en la Asociación Nacional de Actores, asunto que ya se atiende, informó Alejandro Calva, secretario del Trabajo y Conflictos.

Abarrotó el recinto un público integrado en gran parte por miembros de la comunidad teatral como, por ejemplo, Rafael Sánchez Navarro, Luisa Huertas, Paloma Woolrich y Lorena Maza. Tampoco faltó el cóctel.