Inundaciones, parte consustancial de la historia de Monterrey
July 13, 2023 - por Raúl A. Rubio Cano.

Monterrey, N.L.
Ayer miércoles 12 de julio, por la mañana, al término de la Mesa del Medio Ambiente, el gobernador del estado de Nuevo León, Samuel García Sepúlveda, ordenó parar las obras de desmonte en el lecho del Río Santa Catarina, de la ciudad metropolitana de Monterrey.
Argumentó que ante la inminente llegada de fuertes huracanes promovidos por el arribo del fenómeno de El Niño y demás cambios climáticos que hoy vivimos, se impactarían unas mil 200 hectáreas, prácticamente todo el Centro de la Ciudad y se pondría en riesgo a 50 mil personas, todo ese escenario ha sido determinado por un conjunto de “expertos” y “especialistas” que han vaticinado lo que se avecina.
Obviamente, las generalizadas protestas ciudadanas de los últimos días, que se desataron en defensa del Río por muy diversos sectores de la ciudad y medios de comunicación locales, nacionales e internacionales y hasta el uso de recursos legales, para detener la destrucción rapaz del plan del Río, determinó poner “en pausa” las máquinas que llevan ya según el gobernador, un 1% de desmonte, en su parte más peligrosa (Recordemos, que se autorizó desmontar y desenraizar a CONAGUA por SEMARNAT, el 1 de marzo del 2021, un total de 26 kilómetros, equivalentes a 355.6 Ha. que van desde el Puente Israel Cavazos en el municipio de Guadalupe, al arroyo de El Obispo, en el municipio de San Pedro Garza García)
Ayer, también, planteó el gobernador Mesas de Diálogo con la ciudadanía y su gobierno y la Federación y, decirles que ante el derecho a la vida y la seguridad por el eminente riesgo de un huracán, y por otro lado, el derecho a cuidar el medio ambiente (el Río), se tiene que encontrar un equilibrio para respetar ambos derechos que están en nuestra Constitución Federal y Estatal.
Insistió García Sepúlveda, que se sigue trabajando en materia hídrica para garantizar el agua a la ciudad metropolitana, como el caso del proyecto Cuchillo 2 y la Presa Libertad, y también, la seguridad de la ciudad con la segunda Presa Rompepicos que se va a realizar.
Por los siglos de los siglos
La Metropolitana Ciudad de Monterrey, desde su primer asentamiento en el año de 1577, impulsado por el capitán Alberto del Canto, se realizó al lado de lo que fue conocido como el Río Santa Lucía.
Sería hasta el año de 1612, en la administración del hijo de Diego de Montemayor, que se destruyó la naciente ciudad por la llegada de gran huracán y, obligó a sus habitantes a salir de las orillas del Santa Lucía (hoy, calle de Juan Ignacio Ramón y migrar hacía las hoy calles de Morelos –Barrio Antiguo-y calles de Padre Mier e Hidalgo. Véanse los planos urbanos de Monterrey, desde mediados del siglo XVIII) una realidad catastrófica que ha venido sucediendo en 1648, 1782, 1810, 1881, 1909, 1938, 1967, 1988 y 2010.
Por lo tanto, la llegada de huracanes y respectivo impacto a Monterrey, es un asunto afín a la realidad de la misma, en su interacción con las aguas que llegan del Golfo de México y su naturaleza hidrogeológica, por el sitio que se determinó para establecer su fundación: un valle (Valle de la Extremadura), rodeado de montañas, que éstas operan como una gran “Fábrica de Agua”, que lo abastecen por dos grandes sub cuencas: el Río Santa Catarina y el Río Pesquería, “brazos hídricos” que la abrazan amorosamente, conformados a su vez, por una gran cantidad de arroyos, hoy destruídos por la bárbara urbanización pero que se activan con la llegada de fuertes lluvias.
Equipo de especialistas de pacotilla
Por lo tanto, el temor de Samuel de gran inundación por venir, se basa en una situación inmediata, pragmática y leguleya de él y su equipo de especialistas de pacotilla (verdadero séquito de perversos profesionistas) que más que pensar en seguridad de la ciudad y cuidados del medio ambiente, aprovechan la excusa de la llegada de fuertes huracanes e inundaciones para sacar adelante los objetivos de apropiarse del Río Santa Catarina por un grupo de Zares Inmobiliarios, todo ello documentado en el estudio de AECOM (compañía californiana) de Abril del 2013, estudio mandado realizar por el Consejo Estatal para la Reconstrucción de Nuevo León, conformado por los 10 grupos empresariales más fuertes en la entidad y, el entonces gobernador Rodrigo Medina y su padre, para supuestamente resolver la destrucción ocasionada por el huracán Alex en 2010, mediante la construcción de un “Plan maestro del Corredor Integral de Movilidad Sustentable, Constitución-Morones Prieto y, el Plan maestro de uso recreativo y deportivo público en el Lecho del Río Santa Catarina”.
La llegada de huracanes e inundaciones en nuestra metrópoli no es un asunto de destruir 26 kilómetros (355.6 Ha.) de Bosque Urbano en el plano del Río Santa Catarina, con sus respectivos servicios ambientales que prestan al área metropolitana de mil 300 millones de dólares anuales (o dejar un 4% de ese bosque, como antier ofreció en junta privada el gobierno de Samuel a algunos ambientalistas en plan de guerra), sino de un verdadero plan hidrogeológico para manejar la gran Fábrica de Agua y sus escurrimientos al área metropolitana de Monterrey, con un horizonte de verdadero Humanismo y respeto a la Madre Naturaleza, cosa que ya el Pueblo Sabio de estos tiempos de Revolución de las Conciencias, va impulsando y no, bajo el interés mezquino de unos cuantos Zares inmobiliarios, sus políticos títeres y sus funcionarios ignorantes, perversos y utilitaristas ¡Órale!