Tras la eliminación del horario de verano, la población mexicana se prepara para atrasar su reloj por última vez en la historia. El próximo domingo 30 de octubre, las manecillas del reloj tendrán que cambiarse a las dos de la madrugada para retrasar una hora para volver al horario de invierno, y después de ello ya no habrá necesidad de hacer ningún cambio en el 2023 ni en los años posteriores.

Sin embargo no todos los estados de la República Mexicana implementarán esta acción, en el caso de Quintana Roo se mantendrá como hasta ahora ya que es parte del grupo 75° oeste, lo que significa que siempre van una hora adelantada en comparación con el centro de México.

Sonora es el segundo estado que no cambiará manecillas ya que mantiene una relación comercial con Arizona.

En ese sentido, los estados de la franja fronteriza que deberán mantener el horario de verano, con el objetivo de no interferir o afectar el intercambio comercial con Estados Unidos son los siguientes.

Baja California: Tijuana, Mexicali, Ensenada, Playa Rosarito y Tecate.

Chihuahua: Juárez, Ojinaga, Ascensión, Coyamel del Sotol, Guadalupe, Janos, Manuel Benavides y Práxedis G. Guerrero.

Coahuila: Acuña, Piedras Negras, Guerrero, Hidalgo, Jiménez, Zaragoza, Nava y Ocampo.

Nuevo León: Anáhuac y Los Aldama.

Tamaulipas: Nuevo Laredo, Reynosa, Matamoros, Camargo, Guerrero, Gustavo Díaz Ordaz, Mier, Miguel Alemán, Río Bravo y Valle Hermoso.

¿Por qué se eliminó el Horario de Verano?

El tema se retomó debido a que las autoridades detectaron un creciente rechazo popular, pues existe tal inconformidad en la sociedad desde al año de 1996, justo cuando se instaló este horario.

De igual manera se comprobó que el ahorro de energía es muy bajo con la aplicación del Horario de Verano, según las mediciones realizadas por la Secretaría de Gobernación, respecto al consumo total no hay un impacto considerable. Y de acuerdo a la evidencia científica no hay cambios importantes en la luz solar en los países cercanos a los trópicos.

Por otro lado se encuentran los aspectos médicos relacionados al horario de verano, pues el mismo titular de la Secretaría de Salud, el Dr. Jorge Carlos Alcocer, ha detallado las afectaciones directas que tiene en la salud.

Se basó primeramente en el reloj biológico de los humanos, pues su principal cometido desde que se nace, es regular las funciones de diferentes proteínas y órganos. Es en este proceso donde puede afectar severamente el constante cambio de hora, ya que se altera el tiempo de exposición al sol y desequilibra el reloj biológico.

Uno de los beneficios del horario de invierno es que promueve un ritmo biológico más estable que el del verano. Incluso puede llegar a mejorar el rendimiento intelectual y ayudar a disminuir enfermedades relacionadas con el corazón, la obesidad, el insomnio y la depresión.

Normalmente el Horario de Verano se aplica de golpe, cada año llega ese día en el que se tiene que adelantar o retrasar el reloj. Por eso, gran parte de la sociedad algunas veces demuestra necesitar más descanso o se siente desconcertada y confundida días posteriores a los cambios de manecillas.

La falta de sincronización con el medio ambiente llega a alterar el orden temporal interno y causa problemas físicos y mentales. Por otro lado investigadores de la UNAM observaron modificaciones en la calidad del sueño, motivo por el cual se detonan diferentes condiciones como insomnio, aletargamiento diurno, ansiedad o hasta depresión.