La corrupción y el neoliberalismo acabaron con la soberanía de México en vacunas por eso ahora espera la que combata a la COVID-19 mirando hacia el exterior, señala el diario español El País.

“Con una de las pandemias más brutales que se recuerdan desde la gripe de 1918, la palabra vacuna se ha convertido hoy en el término de la esperanza en todo el mundo. Pero México, como tantas otras naciones, ha ido perdiendo su soberanía en este campo, arrastrando con ello la investigación que se desarrollaba en sus laboratorios y el empleo que se generaba. Ahora la dependencia internacional obliga a competir en un mercado donde ganará el que más dinero ponga sobre la mesa”, señala el periódico en el texto México fue una potencia en vacunas: ahora espera la de la COVID-19 mirando al exterior, firmado por Carmen Morán Breña.

Fernando Ramos, profesor de la facultad de Medicina de la UNAM, explicó a El País que más del 90 por ciento de las vacunas que se aplican en México hoy provienen del sector privado. “Hoy el Birmex, como se denomina a los laboratorios nacionales y de reactivos de México apenas se encarga del tétanos, la difteria y la poliomelitis”, detalla El País.

“La UNAM está trabajando en su vacuna contra la covid-19, pero no es lo mismo hacerlo en un laboratorio para probar en animales que producir para millones de personas”, dijo Ramos al periódico español. Y agrega: “México ya no compite a la cabeza en las vacunas”.

En el texto se señala cómo México fue productor de vacunas, incluso exportador. “En 1943, la Asociación Americana de Pediatría aceptó la vacuna contra la tosferina. México la producía desde 1940. Y a finales de los ochenta exportaba a 15 países sus biológicos”. Pero luego vino la corrupción y el neoliberalismo.

Esta pandemia, sin embargo, ha hecho al mundo reflexionar sobre el desmantelamiento de los sistemas de salud, y México podría tomar otro camino a partir de ahora.

Los últimos gobiernos federales en México no mostraron interés por apoyar a Birmex, la empresa estatal productora de vacunas, dijo a SinEmbargo la virotecnóloga Laura Palomares, quien coordina un equipo de investigación en la UNAM para crear una vacuna contra el coronavirus.

“El abandono [a Birmex] ha sido de parte de las políticas públicas, donde no se ha puesto como una prioridad nacional a la fabricación de vacunas en México, sino como algo secundario”, dijo vía telefónica sobre la compañía estatal fundada el 11 de marzo de 1999. “En las últimas administraciones [la de Vicente Fox Quesada (2000-2006), la de Felipe Calderón Hinojosa (2006-2012) y la de Enrique Peña Nieto (2012-2018)] los gobiernos no han mostrado ningún interés en apoyar a Birmex o en respaldar la producción de vacunas ni de farmacéuticos”, afirmó Palomares, quien agregó que la nueva dirección de la Licenciada Laura Velázquez ha mostrado voluntad para reimpulsar la producción.

Su presupuesto aumentó de 2018 a 2019 un 50.53 por ciento a más de 4 mil 112 millones de pesos, y otro 43 por ciento en 2020 a más de 5 mil 900 millones de pesos, de acuerdo con la Secretaría de Hacienda.