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Morena Coahuila, una contradicción histórica

June 4, 2023 - por

Morena Coahuila, una contradicción histórica

SALTILLO, COAH.

Como dice el dicho, “no hay deuda que no se pague ni plazo que no se cumpla”, y en 2023 por fin se llegó la fecha crítica del 4 de junio, tanto para los habitantes de Coahuila como del Estado de México.

Día de feroces elecciones locales en ambas entidades, por tratarse de las últimas dos gubernaturas del PRI, vistas también por muchos como las dos últimas madrigueras de grupos políticos gansteriles, como el Grupo Atlacomulco en el estado mexiquense y el cacicazgo familiar y nepotista de los Moreira en Coahuila.

Por ello, también día histórico considerando la larga trayectoria del partidazo presidencialista de México, llamado en 1999 la “dictadura perfecta” por Mario Vargas Llosa, cuando ni remotamente se sospechaba su posible aniquilamiento ante la fuerza electoral de Morena.

Aunque, un minuto…, ¿qué no es Coahuila el escenario donde Ricardo Mejía Berdeja, ex subsecretario de Seguridad Nacional, ha sido acusado de dividir a la izquierda por haber desconocido el resultado de las encuestas de Morena, además de haber salido a refugiarse al PT?

¿Qué tanto hay de cierto que este político, oriundo de Torreón, Coahuila, sería el principal culpable de la derrota de Morena ante el dinosáurico PRI?

Después de todo resulta difícil atribuirle tanto estigma de ilegitimidad o traición, cuando en realidad encabeza un movimiento político más que a una militancia partidista, considerando no solo a los moreno-petistas que le siguen, sino a cientos de coahuilenses sin partido, es decir ciudadanos no corporatizados, que terminaron integrándose al llamado “Movimiento Coahuilense por la Cuarta Transformación”.

Al respecto, Alejandro Navarro Rodríguez, ingeniero agrónomo egresado de la UAAAN y ex Subdelegado de la Secretaría de Bienestar en Coahuila, comenta que este movimiento, “Inició con marchas y denuncias públicas, pero lo más importante es que la mayoría de la gente que sigue a Mejía Berdeja no está recibiendo ni un peso de pago, es simplemente gente que está convencida de la necesidad de un cambio en nuestro estado”.

Y añade, “lo sustantivo de este proceso es que, aunque se pierda en la elección, el movimiento Coahuilense de la 4T debe seguir, crecer y formalizarse para poder establecer un contrapeso político en Coahuila”.

Una declaración que representa el quiebre político de Morena en esta entidad desde diciembre de 2022, cuando Mario Delgado declaró ganador de la encuesta a Armando Guadiana Tijerina, y gran parte de los morenistas y coahuilenses en general dejaron de percibir al partido del presidente como la fuerza suficiente y necesaria para derrotar al priismo parasitario.

Y esto quizá no se limita al hecho de que Guadiana Tijerina sea amigo de Miguel Ángel Riquelme y del propio delfín del moreirato, Manolo Jiménez Salinas, o a que el senador con licencia hizo más bien el ridículo en los debates de campaña o incluso a que repartió despensas durante la misma, sino a su tangencial, prácticamente nula participación o involucramiento en la fundación y consolidación del Movimiento de Regeneración Nacional en Coahuila.

EL CANDIDATO, SIN VÍNCULOS DE ORIGEN EN MORENA COAHUILA…

Entre los antiguos fundadores de Morena en el estado se encuentra, precisamente, Alejandro Navarro Rodríguez, debido a su participación en el proceso nacional del llamado “Gobierno legítimo” de AMLO, en oposición a la presidencia espuria de Felipe Caderón, y quien aporta interesantes datos relativos al origen de Morena en Coahuila.

“En septiembre  y octubre de 2012 Andrés Manuel convocó a  formar los primeros comités estatales del Movimiento de Regeneración Nacional en todo el país, y aquí en Saltillo, a mano alzada, se eligió como Presidente a la monclovense Claudia Garza del Toro, a Francisco Javier López Loza como encargado de Finanzas, y como Secretario de Organización Política a Arturo Del Bosque Villarreal, hermano de Diego, el actual presidente del partido en el estado”.

Posteriormente, la primera asamblea nacional de Morena se convocó el 20 de noviembre de 2012, integrando en su orden del día la formalización de principios y reglamento interno, así como la integración del Consejo Político y el Comité Nacional, si bien no fue hasta el 9 de julio de 2014 cuando el INE otorgó registro como partidos a Morena, al Partido Humanista y al Partido Encuentro Social (los dos últimos prácticamente desaparecidos).

Tres años después, en octubre de 2015, Morena convoca a la militancia a integrar las asambleas distritales para formar los segundos comités, tanto de los estados como el nacional, quedando en Coahuila como presidente Miroslava Sánchez Galván, José Guadalupe Céspedes como Secretario de Organización y Raúl Mario Yeverino García como presidente del Consejo Político.

El 20 de noviembre de ese mismo año AMLO, entonces candidato, convoca en la ciudad de México a los colaboradores que desearan integrarse como “enlaces” de una estructura alterna a Morena, destinada a coordinar los trabajos de su campaña para 2018 y, en el caso de Coahuila, también la campaña local que se efectuaría en 2017.

“Por eso en Morena los del Comité estatal quedaron muy enojados con AMLO, pues no los integró en esa segunda estructura, al punto de que a los enlaces locales les pagaba directamente la Secretaría de Organización de Morena nacional, sin ninguna intervención del Comité estatal, que por su parte recibía las prerrogativas correspondientes del INE”, explica el ingeniero Navarro Rodríguez.

Igualmente, siguiendo su relato, a los enlaces locales la directiva nacional les solicitó que integraran equipos de brigadistas a los cuales denominaron COTS o “Coordinadores Territoriales”, cuya función era promover la imagen del entonces candidato Andrés Manuel López Obrador, integrar los comités de base del partido, entregar el periódico Regeneración y realizar la afiliación a Morena, es decir, prácticamente todas las funciones que debería haber cumplido su partido.

“De hecho, esta estructura alterna fue la que ganó la elección federal para Coahuila en el 2018”, añade Navarro Rodríguez, “quedando el comité estatal al margen del triunfo, con un estilo de política partidista de patio, de asambleas internas realizadas en el comité, mientras que los cargos más importantes del estado fueron otorgados a algunos de los integrantes de la segunda estructura, a excepción del delegado estatal de Bienestar, Reyes Flores Hurtado, que fue puesto directamente por Guadiana”.

ARMANDO GUADIANA, EMPRESARIO EX PANISTA, SENADOR CON LICENCIA PERO NUNCA MORENISTA…

Según relata el ex Subdelegado estatal de Bienestar, Armando Guadiana nunca participó en la formación de Morena Coahuila y tampoco en la llamada estructura alterna,  pesar de que ésta le llevó su campaña como candidato para gobernador en 2017, misma que perdió ante el priista Miguel Ángel Riquelme y por lo cual se unió en términos casi personales a Guillermo Anaya, ex contendiente panista, en la denuncia del fraude electoral del PRI.

“También en ese movimiento Guadiana se gestionó casi solo, sin el respaldo partidista de Morena, y finalmente no pasó nada porque en diciembre de 2017 Miguel Riquelme tomó su cargo como gobernador de Coahuila por el PRI”, señala.

Siguiendo esa misma trayectoria por fuera del partido, personajes como el regiomontano Poncho Romo o el saltillense Juan Pablo Rodríguez reforzaron a Guadiana Tijerina ante Andrés Manuel como candidato a Senador, y a Eva Galaz, hija de un emblemático y entrañable amigo de AMLO, acaudalado empresario de Castaños, como candidata a la segunda posición de Coahuila en el senado.

Ratificando esta versión, Salvador Martínez Rangel, igualmente ingeniero agrónomo egresado de la UAAAN y afiliado a Morena desde noviembre de 2016, recuerda que en ese tiempo, para dar a conocer al partido en Coahuila, vino gente de México en apoyo a las candidaturas locales de 2017.

“A mi me tocó el equipo de Clara Brugrada (actual alcaldesa de Ixtapalapa), quien tenía como coordinadora del distrito 16 en Coahuila a la diputada de Morena, Ana Rodríguez, y así en cada distrito de Coahuila había un representante, que por lo general era gente con cargo de elección popular enviada desde México para coordinar cada distrito”.

En ese tiempo en que Morena en Coahuila “no pegaba”, según recuerda Martínez Rangel, el delegado en el estado era el hoy Senador César Cravioto, y las actividades consistían en convocar a la gente e ir haciendo territorio, actividad para la cual fue invitado, formalizando su registro en  la oficina entonces ubicada en la calzada Antonio Narro.

“Más adelante Morena se cambió a una casa ubicada en Hidalgo y Múzquiz, donde los dirigentes eran, entre otros, Yeverino, presidente del Consejo, Arturo Del Bosque (papá del actual presidente de Morena), y Eleazar Cabello Palacios que se atribuyó ser integrante del supuesto Consejo Consultivo del partido, que nunca operó, y se la pasaban grillando a los delegados para la elección de 2017, pero el problema es que a ellos no les gustaba salir a territorio; en ese tiempo la presidente de Morena era Miroslava Sánchez Galván”, señala Martínez Rangel.

De acuerdo a su opinión, para las elecciones locales de 2017 Morena Coahuila aún no estaba bien constituida y la prueba está en que no ganó ni una diputación de mayoría, ni mucho menos la candidatura para gobernador de Armando Guadiana, sólo el candidato a alcalde de Saltillo, Rodolfo Garza Gutiérrez, perdió frente al priista Manolo Jiménez Salinas, aunque ocupó una regiduría que en ese tiempo duraba el cargo solo un año.

Por cierto que al año siguiente, 2018, se volvió a contender por las alcaldías, y en Saltillo ganó por segunda ocasión Manolo Jiménez, el supuesto gran reto político de la actual dirigencia morenista, amalgamada desde el centro del país, como en los orígenes, frente a una militancia rebelde que conoce a fondo las carencias del candidato, sus grandes contradicciones de formación, integración y coherencia con la causa morenista y la 4T de Andrés Manuel.