Y finalmente, no hubo recortes al presupuesto educativo de California. El gobernador Gavin Newsom y la Legislatura “salvaron el próximo año escolar”, expresaron superintendentes de los más grandes distritos escolares del estado. Ahora conminan al gobierno federal a hacer su aporte, a formar parte de la solución.

El presupuesto final compensa la pérdida de ingresos de las escuelas K-14 por  más de 10 mil millones de dólares, causadas por la recesión COVID-19 y difiere los pagos de 12.9 mil millones en el próximo año fiscal para preservar los programas y proporcionar esos planteles los recursos necesarios para reabrir de manera segura, según expresó el gobernador.

Indicó que el estado también comprará equipos de protección personal y otros suministros necesarios para reabrir las escuelas de manera segura.

El presupuesto asigna 5 mil 3 00 millones para mitigar la pérdida de aprendizaje y apoyar las necesidades inmediatas de los estudiantes y las escuelas, con un enfoque en los estudiantes mayormente afectados por la pandemia.

Además, redirige  2 mil 3 mil millones destinados a pasivos de pensiones no financiados a largo plazo para reducir las tasas de contribución del empleador de la escuela (distrito) en los próximos dos años.

Finalmente, el presupuesto hará  asignaciones suplementarias por encima de la garantía de la Propuesta 98 durante varios años a partir de 2021-22, lo que acelerará el apoyo del Fondo General para las escuelas durante el período de pronóstico de varios años.

El presupuesto total es de 202 mil 100 millones “que fortalece la respuesta de emergencia, protege la salud y la seguridad pública y promueve la recuperación económica al cerrar un déficit presupuestario de 54.3 mil millones causado por la recesión COVID-19”, indicó el mandatario.

“Frente a una pandemia global que también ha causado una recesión en todo el mundo y aquí en California, nuestro estado ha aprobado un presupuesto que es equilibrado, responsable y protege la seguridad y salud pública, la educación y los servicios para los californianos que enfrentan las mayores dificultades “, destacó Newsom.

Los Superintendentes de los Distritos Escolares Unificados de Los Angeles, San Diego, Long Beach, Oakland y Sacramento agradecieron al mandatario y a la Legislatura “ por alcanzar un compromiso histórico para salvar el próximo año escolar”.

Ellos habían pedido fondos estatales adicionales para abordar tanto los costos de reapertura como el impacto de la pérdida de aprendizaje, especialmente entre las comunidades históricamente desfavorecidas que son las más afectadas por la pandemia.

Dijeron que esas medidas fueron incluidas en el paquete de compromisos anunciados por el gobernador Newsom, el Senado Pro Tempore, Toni Atkins, y el presidente de la Asamblea, Anthony Rendon.

“En las recesiones económicas pasadas, la disminución de los presupuestos estatales se ha equilibrado en la espalda de nuestros estudiantes. Este gobernador y los legisladores han optado por ir de otra manera. Hemos sido claros al señalar que las escuelas necesitarán más dinero, no menos, para abrir en medio de una pandemia mundial. Eso es lo que se ha logrado: California se ha unido y ha utilizado todas las palancas a nuestra disposición para reabrir las escuelas en el otoño”, dijeron los Superintendentes, de Los Angeles, Austin Beutner, de San Diego, Cindy Marten, de Long Beach,  Chris  Steinhauser, de la ciudad de Sacramento, Jorge Aguilar, y de Oakland ,Kyla Johnson-Trammell.

En una declaración conjunta, indicaron que a menos de 60 días para el nuevo ciclo escolar, el tiempo se está acabando para que los líderes federales aprueben ayuda adicional para apoyar el año escolar 2020-21.

“Los líderes estatales y locales han liderado la respuesta a la crisis COVID-19. Los distritos escolares de California han respondido heroicamente a las necesidades de las comunidades a las que sirven, distribuyendo comidas gratuitas y computadoras gratuitas. El gobernador Newsom y la Legislatura estatal han hecho su parte. Ahora, es hora de que el Congreso actúe. Los líderes locales no pueden resolver los problemas nacionales por sí solos. Washington, D.C. debe ser parte de la solución”, dijeron los Superintendentes Beutner,Marten,  Steinhauser,Aguilar y Johnson-Trammell.

Por su parte, el Superintendente de Instrucción Estatal, Tony Thurmond,  tuvo frases de encomio para el gobernador y los líderes de la Asamblea y el Senado, porque preservaron los fondos para la educación, con lo que se han evitado  recortes y despidos permanentes “que habrían sido devastadores para las escuelas públicas y los estudiantes de California justo cuando más se necesitan los recursos”.

Dijo que COVID-19 ha causado estragos en la economía y por eso agradece que este presupuesto reconozca que las inversiones en educación pública serán un motor crítico para el repunte del estado.

“Nos alienta la asignación de dólares de la Ley CARES por parte de este presupuesto para abordar las carencias de aprendizaje experimentadas durante la pandemia y ayudar a las escuelas a implementar sus planes de reapertura de forma segura. También apreciamos que este plan de gastos aborda los problemas relacionados con la asistencia diaria promedio (ADA) y los minutos de instrucción”, dijo.

Sin embargo, indicó que las escuelas enfrentarán fuertes desafíos en los próximos meses.

“Muchos distritos ya se enfrentaban a terribles proyecciones fiscales antes de la pandemia y será fundamental que continuemos abogando por el alivio federal y buscamos nuevos ingresos en las semanas y meses por venir”.