Enfrascado en pláticas que no avanzan en busca de un nuevo contrato, el sindicato que representa a 60,000 trabajadores de tiendas de supermercado en el Sur de California anunció que sus miembros votarán para decidir si autorizan una huelga en contra de las tiendas Ralphs, Vons y Albertsons.

 “Las corporaciones propietarias de estas tiendas dieron a sus ejecutivos aumentos de hasta un 34% el año pasado y pagaron un cuarto de billón de dólares a sus dueños. Estamos cansados de que ellos empujen a la pobreza a los empleados que trabajamos arduamente”, dijo Sal Vega, un empleado de Ralphs y miembro del sindicato UFCW 770. “A menos que nosotros luchemos por nosotros mismos, ellos seguirán impidiendo que las ganancias lleguen a la comunidad y a sus empleados. Voy a votar SI para autorizar una huelga si es necesario”, agregó el trabajador.

 El voto, programado para finales de este mes, dará a los negociadores del sindicato en la mesa de negociaciones, la autorización de llamar a huelga si es necesario. Esto no significa que los empleados vayan a salir de sus lugares de trabajo inmediatamente.

 “Los negociadores corporativos continúan ofreciendo un contrato que no valora a sus empleados. A pesar de los billones de dólares en ganancias y los cientos de millones de dólares pagados a los inversionistas, las corporaciones proponen enormes  reducciones de salario para cajeros y recortes a la red de seguridad de atención médica”, indicó John Grant, Presidente del Sindicato de Trabajadores Unidos de la Industria de Alimentos y el Comercio (UFCW) Local 770. “Nosotros no vamos a quedarnos parados mientras las corporaciones obtienen ganancias obscenas a expensas de los trabajadores que hacen prósperos sus negocios”.

 En 2003, Albertsons y Ralphs forzaron a sus empleados a dejar de laborar después de que trabajadores salieron en huelga en contra de Vons en respuesta a recortes injustos a los sueldos y a la cobertura médica. La huelga duró más de cuatro meses y resultó en cientos de millones de pérdidas a las corporaciones de tiendas de supermercado, un procesamiento federal criminal y $700 millones en penalizaciones en contra de Ralphs por violación flagrante a las leyes laborales de Estados Unidos.

 El actual contrato de tiendas de supermercado venció el 3 de marzo.