El Presidente Andrés Manuel López Obrador pidió ayuda a los reporteros que asisten a Palacio Nacional todas las mañanas: que no le pregunten temas que pudieran generar declaraciones que sean sancionadas por el Instituto Nacional Electoral (INE), como sucedió ayer, cuando un video tuvo que ser bajado de las redes por ser considerado propaganda.

“Hay que cuidarnos y ayúdenme ustedes. No me pregunten cosas que sean comprometedoras porque si ustedes me preguntan, pues les tengo que contestar; si no, van a decir ‘¿y para qué las ‘mañaneras’?’”, dijo a los reporteros que se congregaron en su conferencia de prensa matutina de este martes, a pregunta expresa después de la sanción del INE.

El mandatario mexicano insistió en que será más cuidadoso para no hablar de temas partidistas o de asuntos relacionados con la elección. Sin embargo, subrayó que sí abordará todo sobre la democracia, la participación, de que no haya fraude electoral, de que se celebre una elección o elecciones limpias y libres, de que no intervenga el Gobierno, así como de que no se utilice el presupuesto público para favorecer a ningún partido o candidato.

También, aclaró, seguirá haciendo el llamado a que existan “condiciones de igualdad para todos. Que haya democracia, eso sí, sin inclinar la balanza o mostrar preferencia por algún partido o algún candidato”.

Luego se le cuestionó si no estarían el INE y él en una permanente confrontación por las “mañaneras”, a lo que López Obrador respondió que “no podrían hacerlo”. “Es mi derecho de manifestación, es mi libertad. Y eso está por encima de cualquiera otra disposición, cualquier otro reglamento. No, imagínense: sería un golpe de Estado técnico”, aseguró.

“¿Qué le molesta más al partido conservador? El que podemos informar en las [conferencias] ‘mañaneras’. Si no, nos rodearían, nos cercan, y toda la campaña sería lo único que prevaleciera. Ya les dije la vez pasada: pongan la radio, pongan un noticiero. Como van a tardar en llegar a su destino, pónganle a otro, y a otro. Constantemente, ataques. Si no tuviéramos la posibilidad de informarle a la gente sería como antes, un retroceso. Ojalá y no saquen esos afanes autoritarios, dictatoriales”, agregó.

“Además, son muchos, no hay siquiera equidad. ¿Cuántos periódicos o articulistas toman en cuenta nuestros argumentos? Hagan un ejercicio, del día de hoy. Hagan un análisis de contenido y de manera esquemática, cuántas notas en contra, a favor; cuántos neutrales, cuántos en contra”, señaló el Presidente.

Estas declaraciones se dan después de que la conferencia matutina del viernes 16 de abril fuera retirada de las redes sociales oficiales del Gobierno de México, luego de que el Instituto Nacional Electoral (INE) le ordenara al Jefe del Ejecutivo federal abstenerse de difundir logros de Gobierno para evitar violar la veda electoral.

Le pidió eliminar de redes sociales y plataformas oficiales del Gobierno federal el material de la conferencia de ese día por la presunta difusión de propaganda gubernamental en periodo prohibido, señalada por el Partido de la Revolución Democrática (PRD) y por Movimiento Ciudadano (MC).

En un comunicado, el INE informó de una medida cautelar vía tutela preventiva contra el Presidente mexicano para que durante las campañas electorales y hasta el 6 de junio “se abstenga de difundir logros de Gobierno, incluyendo programas sociales y las personas beneficiarias de obra pública”.

E incluso “emitir cualquier tipo de información que pueda incidir en las preferencias electorales de la ciudadanía”.

Dijo que esa obligación de neutralidad del Presidente debe observarse incluso cuando responda a preguntas en sus conferencias de prensa.

En consecuencia, la autoridad electoral le ordenó a López Obrador que “de inmediato, en un plazo que no exceda de seis horas, elimine o modifique las publicaciones que contienen la conferencia del 16 de abril de dos vínculos de Facebook y uno de YouTube”.

Así como a la coordinación general de Comunicación Social y Vocería del Gobierno mexicano que en el mismo plazo eliminara dicho contenido de las redes sociales y plataformas oficiales del Presidente y del Gobierno de México.

La Comisión de Quejas del INE otorgó la razón a los partidos denunciantes que señalaron que el mandatario violó la veda electoral, el 16 de abril, al hablar de la aplicación de programas sociales de su Gobierno en los estados de Guerrero, Chiapas y Oaxaca.

La Comisión estimó que “bajo la apariencia del buen derecho, las manifestaciones aludidas, se consideran constitutivas de propaganda gubernamental, con la exaltación de logros o acciones gubernamentales”.

El Presidente Andrés Manuel López Obrador durante su arribo a la conferencia de prensa en Palacio Nacional.

El Presidente Andrés Manuel López Obrador durante su arribo a la conferencia de prensa en Palacio Nacional. Foto: Gobierno de México

Además, indicó que las declaraciones estuvieron acompañadas de la reproducción de imágenes, particularmente una tabla que contenía datos sobre tres entidades en las que se señalaron cifras de las personas beneficiarias, aun y cuando en las mismas se están llevando a cabo los procesos electorales federal y locales.

La Comisión reconoció que “no se trató de manifestaciones espontáneas, sino que, de un análisis preliminar, se advierte que fueron preparadas para su emisión pública, pues contenían gráficas y datos previamente obtenidos de una dependencia gubernamental”.

Además, la Comisión advirtió la existencia de “un riesgo inminente de que vuelva a ocurrir tal conducta y se ponga en riesgo los principios rectores del proceso electoral”.

El próximo 6 de junio, 94 millones de mexicanos están llamados a las urnas para elegir a los 500 diputados federales, 15 de 32 gobernadores estatales, 30 congresos locales y mil 900 ayuntamientos, en lo que se consideran las elecciones más grandes del país.

FUE VACUNADO

El Presidente Andrés Manuel López Obrador recibió esta mañana una primera dosis de la vacuna contra la COVID-19 de AstraZeneca, en vivo, desde Palacio Nacional, para dar confianza a los adultos mayores que todavía no aceptan ser inmunizados.

El mandatario se quitó el abrigo y se sentó en una silla al lado del atril presidencial, donde la teniente enfermera del Ejército Melina Vega le mostró la jeringa, le levantó la manga izquierda de la camisa, le inyectó la vacuna y le entregó su registro de vacunación.

“No duele, pero además ayuda mucho y nos protege a todos. Hago un llamado a todos los adultos mayores para que todos nos vacunemos. No hay ningún riesgo”, expresó después de ser vacunado el Presidente, de 67 años, hipertenso y reacio a llevar cubrebocas en público.

Previamente, López Obrador dijo estar “muy tranquilo”, con “cabeza fría y corazón caliente”, y tras la inoculación bromeó con que la enfermera, que portaba guantes, “tiene las manos muy suaves”.

El Presidente se retiró de la conferencia de prensa para permanecer en observación durante 30 minutos por posibles efectos adversos como dolor en la zona de la inyección.