Madrid.

La ola de indignación por el encarcelamiento del rapero catalán Pablo Hasél crece, al menos en Barcelona, donde se registró la mayor movilización en el quinto día de protestas, cuando más de cinco mil personas marcharon por el centro de la ciudad con el fin de reclamar libertad para el cantante.

También en Madrid, unas 300 personas, la mayoría jóvenes de antifascistas y anarquistas, se concentraron en apoyo a Hasél. Se limitaron a gritar consigas como “Libertad, Pablo Hasél”, “Podemos, PP, la misma mierda es” o “Me cago en el Rey”.

En Lleida, en Tarragona y Pamplona también hubo protestas, aunque de menor tamaño en la que se quemaron contenedores y vehículos, entre otras acciones.

En la capital catalana, además de la marcha reivindicativa, hubo duros enfrentamientos cuando los grupos antifascistas intentaron atacar la Jefatura Superior de la Policía Nacional, destrozaron y saquearon tiendas y comercios.

Desde su detención en la Universidad de Lleida, el rapero Hasél, donde se había atrincherado con unos 150 seguidores, las calles de Cataluña son un polvorín.

La quinta noche de las protestas en Barcelona fue quizá la más violenta, con más de cinco mil personas que, además de lanzar consignas por la libertad del detenido, quemaron contenedores, botes de basura, motocicletas, vehículos y todo tipo de mobiliario urbano.

Además saquearon tiendas de lujo, rompieron vidrios de muchos edificios de una de las calles más caras de Barcelona –el Paseo de Gracia–, intentaron entrar a la Bolsa de Valores y dañaron el edificio del Palau de la Música, inmueble histórico.

En esta ocasión, los agentes antidisturbios, los Mossos d’Esquadra sí actuaron contra los manifestantes, sobre todo cuando destrozaron tiendas y bancos, así como cuando intentaron atacar el edificio de la Policía Nacional. El balance provisional sólo en Barcelona era de 12 detenidos y una veintena de heridos leves, según la propia policía de la ciudad. No se respetó el toque de queda que está fijado a las 10 de la noche por la crisis sanitaria, que actualmente tiene un alto índice de contagios en la región.