El Presidente Andrés Manuel López Obrador concluyó su gira por el estado de Tamaulipas con un discurso que duró menos de cinco minutos debido a las protestas de la gente que se encontraba en el evento y donde el principal reclamo vino del Gobernador Francisco Javier Cabeza de Vaca, quien le pidió intervenir en el conflicto del agua.

Voy a ser breve porque hay mucha pasión, se movilizaron mucho aquí en Nuevo Laredo y tenemos que cuidar lo de la pandemia, que no haya contagios”, dijo el Presidente en medio de gritos. “Entre menos tardemos juntos es por ahora mejor, evitar contagios y mantener la sana distancia”.

Al presentar las acciones de mejoramiento urbano desde Nuevo Laredo, TamaulipasLópez Obrador se comprometió a seguir trabajando para beneficio de los tamaulipecos y reconoció las diferencias que tiene con el Gobernador panista de la entidad.

“Quise estar aquí para entregar estas obras que se hicieron en beneficio de las colonias de quienes viven en las zonas marginadas de Nuevo Laredo. Lo mismo se llevó a cabo en Matamoros y Reynosa. Se invirtieron mil 500 millones de pesos en estas obras que tiene como objetivo que la gente pueda participar en las actividades recreativas porque de esta manera se atiende a los jóvenes. Vamos a seguir trabajando en Tamaulipas. Es de dominio público que tenemos diferencias con el gobierno del estado, pero independientemente de estas diferencias tenemos que poner por delante el interés de todos”, mencionó López Obrador en un breve discurso que duró 3:51 minutos, de los más cortos que ha pronunciado como Presidente.

Minutos antes, el Gobernador Cabeza de Vaca salió en defensa de los agricultores del estado de Tamaulipas y pidió al Presidente intervenir en el conflicto que mantienen los estados fronterizos.

“Vamos a luchar por la legalidad, por nuestra tierra, por nuestra gente y esto me da pie para hablar de un tema que ha generado serios problemas en la frontera y que puso en riesgo el acuerdo con Estados Unidos de 1944, que si bien es cierto que ya se resolvió al entregar el agua, también es cierto que quienes estamos en el Río Bravo, que es el sistema de riego más grande de todo el país y donde dependen más de 70 mil familias, el año pasado solo recibieron el 46 por ciento del agua que les correspondía para sus cultivos”, detalló el Gobernador de extracción panista y uno de los 12 integrantes de la Alianza Federalista.

Cabeza de Vaca señaló que Tamaulipas está en riesgo de no recibir agua y es por eso que pidió al Presidente su apoyo y respaldo.

“Es un acuerdo que corresponde resolver a la Federación vía Conagua y con ello podríamos resolver un problema que afecta a varios estados y evitar que servidores públicos pretendan desentenderse de sus obligaciones y endosarnos a los gobernadores de los estados el problema. No queremos trasladar el problema de un estado a otros. Hay quienes pretenden deslindarse al decir que es problema de los estados. No tenemos las facultades para poder atender ese tema, eso le corresponde a la Conagua”, dijo el Gobernador ante el Presidente.

“Por lo anterior expuesto exigimos que se aplique la ley, que el volumen de la cuenca sea distribuido de manera equitativa y legal. En nuestro estado estamos privilegiando el diálogo”, agregó.

Al enfatizar su respeto al Gobierno federal, solicitó al Presidente su intervención en el tema del agua: “Hemos sido respetuosos y prudentes, hemos evitado de politizar este tema, el problema es que existen funcionarios y opositores confunden la prudencia con debilidad, no entienden que nosotros estamos buscando una salida para los agricultores y que no quede la menor duda de que vamos a luchar por la gente.Pedimos su intervención para resolver el problema del agua definitivamente, para poner orden”.

EL CONFLICTO DEL AGUA

El pasado 22 de octubre, el Gobierno federal anunció un acuerdo con Estado Unidos para cumplir el Tratado de Aguas, vigente desde 1944. Ante la negativa del estado de Chihuahua, México transfirió 130 millones de metros cúbicos de presas internacionales y dejó 90 millones para 13 ciudades fronterizas, expuso Roberto Velasco, director general para América del Norte de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE).

“Con esta acta número 325, que se firmó y entregó en vigor ayer, se concluyó el ciclo 35 sin ningún saldo pendiente para México, lo cual era muy importante para cumplir los términos del acta 234 del tratado”, manifestó el funcionario a la agencia EFE.

El Tratado de Aguas establece que México debe entregar cada quinquenio cerca de 2 mil 160 millones de metros cúbicos a Estados Unidos por los ríos que comparten en la frontera, aunque los mexicanos reciben casi cuatro veces más: 9 mil 250 millones de metros cúbicos.

Aunque el tratado data de 1944, México estaba en riesgo de incumplir por la negativa de Chihuahua, estado fronterizo que concentra 54.1 por ciento del líquido que México debe entregar.

Los campesinos protestan contra el trasvase de agua de la presa La Boquilla que el Gobierno mexicano realiza para cumplir con los compromisos del Tratado de Aguas de México y Estados Unidos, pero el Presidente Andrés Manuel López Obrador ha acusado a políticos opositores de estar detrás del conflicto por motivos electorales.

-Con información de EFE