El presidente electo, Andrés Manuel López Obrador,  se reunió este viernes con víctimas de la violencia para escuchar sus exigencias, ruegos y críticas en materia de seguridad y procuración de justicia, con una constante: el rechazo a una amnistía sin que antes se esclarezcan los crímenes.

Durante el Segundo diálogo “Por la paz, la verdad y la justicia” en el Centro Cultural Universitario Tlatelolco, el tabasqueño llamó a las organizaciones y víctimas presentes a buscar soluciones juntos: “necesitamos unidad. Ayúdenme a organizarse. Quiero que me ayuden con la unión, ¡ya basta de la división, polarización y sectarismo. Unámonos por la justicia”, dijo.

Javier Sicilia fue el primer orador.  Durante su intervención solicitó un minuto de silencio para todas las víctimas, pero los asistentes interrumpieron con un grito de justicia.

“Queremos justicia”, “no sabemos dónde están nuestros familiares”, “Así nos quieren callar, tenemos más de 40 años callando…”, “Policía Federal es uno de los más culpables…”, fue parte de lo que se escuchó en la transmisión de la Comisión Nacional de los derechos Humanos (CNDH).

Uno de los momentos más dramáticos se vivió cuando un padre de familia pidió a López Obrador investigar a las autoridades que investigaron el asesinato de su hija.

Inició diciendo que probablemente sea la última vez que pueda hablar en un evento de este tipo, pues se encuentra amenazado de muerte. Cuando se desvaneció, el moderador Sergio Aguayo solicitó un médico.

NO A LA AMNISTÍA POR IMPUNIDAD NI DE FACTO

Lucía Díaz, madre de Luis Guillermo Lagunes, e integrante del colectivo El Solecito, afirmó que es la primera vez en cinco años que las familias tienen oportunidad de expresarse de esta manera ante las autoridades.

“Nos toco luchar, llenar los vacíos que deja el Estado irresponsable, luchar contra todos por encontrar a nuestros seres amados (…) lo hemos hecho a pesar de todo”, afirmó durante su intervención.

La integrante del colectivo El Solecito se manifestó en contra de la amnistía: “No amnistía por corrupción, no amnistía como existe ahora: los delincuentes están libres y las víctimas en la cárcel”.

Mirna Nereyda Medina Quiñones, madre de un joven asesinado cuyos restos fueron encontrados luego de tres años de búsqueda, afirmó que la amnistía o perdón propuesto por López Obrador en campaña debe venir después de un proceso de justicia.

Afirmó que ni siquiera se sabe cuántos mexicanos están en calidad de desaparecidos, porque las víctimas no pueden confiar en las cifras oficiales que pretenden minimizar el fenómeno.

Mirna Medina dijo que agradecerán que el siguiente gobierno cumpla la promesa de campaña de buscar la ayuda de organismos internacionales para investigar y capacitar a los funcionarios mexicanos.

Después de expresar las exigencias a la siguiente administración, la integrante del colectivo “Las Rastreadoras, dijo: “confiamos en usted señor”.

EL ESTADO ESTÁ EN DEDUDA

Aracely Salcedo, madre de la joven Fernanda Rubí, desaparecida en Orizaba, Veracruz, afirmó que el Estado mexicano está en deuda con la sociedad civil desde la llamada ‘guerra sucia’, la guerra contra el narcotráfico y el actual panorama de violencia.

Guadalupe Aguilar, madre de José Luis Arana, afirmó que una justicia penal que no es capaz de proteger a las víctimas está condenada al fracaso.

Sostuvo que el sistema de protección de testigos ha sido abusivo y es ineficaz, porque las personas que están dispuestas a colaborar en investigaciones son amenazadas o asesinadas.

Al dirigirse al presidente electo, sostuvo que México se ha convertido en una fosa:

Los asistentes al encuentro aprovecharon las pausas en el micrófono para presentar a López Obrador sus casos particulares de injusticia. Al principio, el presidente electo escuchó sentado las exigencias del público, pero posteriormente siguió el ejemplo de Olga Sánchez Cordero y permaneció de pie ante cada exigencia del público.

LA RESPUESTA DE LÓPEZ OBRADOR

Como respuesta, López Obrador afirmó que entiende el dolor de los padres y afirmó que el sí perdona, pero comprende a los que tienen otras posturas.

Se comprometió que al asumir el gobierno pedirá perdón a las víctimas de la violencia y comprometerá a su administración para que procure justicia.

El presidente electo sostuvo que durante su administración se verán cambios y se comprometió a no actuar igual que otros políticos.