La alcaldesa de Washington D.C., Muriel Bowser, solicitó nuevamente a la Secretaría de la Defensa el envío de la Guardia Nacional del Distrito de Columbia (DCNG, por sus siglas en inglés) para “ayudar a prevenir una prolongada crisis humanitaria” por la llegada a la capital estadounidense de migrantes en situación irregular.

En un oficio dirigido al secretario de Defensa de EE.UU., Lloyd Austin, Bowser solicitó la asistencia de la DCNG a partir del 22 de agosto de 2022, por un período de 90 días, con la posibilidad de evaluar la petición el próximo 1 de diciembre.

En la carta, la alcaldesa explicó que la mayoría de los migrantes que arriban no contemplan quedarse en la capital estadounidense. En cambio, Bowser apuntó que estas personas “buscan apoyo —normalmente por 72 horas— antes de moverse a su destino final“.

“Necesitamos la ayuda de nuestros socios federales mientras buscamos estabilizar y administrar nuestro entorno operativo en este momento crítico”, escribió Bowser en su cuenta de Twitter.

Ante la llegada de los migrantes, Bowser argumentó en el más reciente oficio enviado al secretario Austin que “la Guardia Nacional cuenta con los recursos únicos para brindar apoyo logístico de emergencia“.

Segunda petición

Se trata de la segunda solicitud realizada, ya que la Secretaría de la Defensa rechazó una petición previa.

El pasado 28 de julio, Bowser informó sobre la solicitud realizada al gobierno federal para el envío de la Guardia Nacional ante el alto número de solicitantes de asilo que habían llegado a la capital, principalmente a raíz de que los gobernadores republicanos de Arizona y Texas, Doug Ducey y Greg Abbott, respectivamente, enviaron en autobuses a Washington a unos 4.000 migrantes, en un momento de cifras récord en los arribos a la frontera sur del EE.UU. y para reclamar al presidente demócrata Joe Biden por su política migratoria.

A diferencia de los 50 estados del país norteamericano, en donde esta fuerza de reserva opera bajo el mando de los gobernadores, en el Distrito de Columbia la Guardia Nacional funciona con el control exclusivo del presidente de la nación