La Educación

Al Servicio del Pueblo Latino de California

Traductor:

English Español Português Français Deutsch

“Escribo para el niño que me habita”: Kestutis Kasparavicius

November 19, 2019 - por

“Escribo para el niño que me habita”: Kestutis Kasparavicius

Kestutis Kasparavicius, escritor e ilustrador de origen lituano. Foto @obrasninosFCE

CIUDAD DE MEXICO

Pareciera que la literatura infantil está enfocada sólo al disfrute, pero no es así. También es una puerta de entrada para que los infantes conozcan el mundo, afirma a La Jornada el célebre escritor e ilustrador lituano Kestutis Kasparavicius.

“Porque a través de estos libros, los niños comienzan a conocer todas las esquinas del mundo; son una puerta de entrada al conocimiento, y no hablo de un aspecto didáctico. Me refiero a que aprenden habilidades y desarrollan varios ámbitos de su persona”.

Nacido en 1954 en Aukstadvaris, el autor presentó este sábado su libro Once cuentos Fantásticos de Kasparavicius, publicado por el Fondo de Cultura Económica (FCE), sello para el cual ha ilustrado otros volúmenes.

En entrevista, con la amable ayuda en la traducción de Jurgita Kukyte, Kestutis Kasparavicius resalta que dedicarse a la literatura infantil no fue una elección, sino es una posición ante la vida.

“Escribo para mí mismo, para el niño que me habita. Da la casualidad de que mis libros gustan a los pequeños. Nunca me ha interesado hacer literatura para adultos, porque no tengo nada que decirles”.

Confiesa que tener contacto con los adultos es para él difícil e incluso le provoca cierto temor: “Me da miedo de que les parezca loco lo que pienso, cosa que con los niños no pasa”.

Otra situación que le resulta compleja es precisar de dónde provienen sus historias e imágenes. Cuenta que cuando trabaja para él no existe otra realidad que la de su imaginación y el mundo a su alrededor no existe.

El autor celebra el buen estado de salud y el reconocimiento social que tiene hoy día en el mundo la literatura infantil y afirma que está en el mismo nivel de la hecha para adultos.

En su opinión, los libros para niños mantienen casi intactas sus formas y técnicas, no así sus contenidos.

“Ahora en los libros infantiles hay menos tabúes, antes se creía que todo debía ser sobre algo bonito. Ahora, los temas son variados y también se habla de cosas muy serias, y eso está muy bien”, indica.

“Inclusive, algunos abordan esa crueldad que vivimos en esta época. Como escritor estoy en contra de ello. Estoy convencido de que eso no puede pasar en los libros infantiles. Lo que sí debe hacerse es hablar sobre las cosas serias, como la muerte, pero de manera delicada y sutil”.

Respecto de la competencia que significan la televisión, los videojuegos y las nuevas tecnologías para la literatura infantil, Kestutis Kasparavicius considera que no debe haber conflictos ni confrontaciones entre ambos mundos.

“El libro impreso tiene un sabor, un olor, algo sensorial, una magia que siempre le gustará a la gente. Además de sus contenidos y lo que pueden enseñar, los libros infantiles son muy buen método para fomentar la convivencia entre padres e hijos, algo que no tiene la tecnología”.