Una tormenta de Acción de Gracias en el Golfo de Alaska desató la lluvia, la nieve y los vientos fríos en el sur de California, amenazando inundaciones y cerrando temporalmente una autopista importante en uno de los fines de semana de viaje más ocupados del año.

Las espesas lluvias de nieve impulsadas por el viento cayeron en las montañas y el Valle del Antílope, donde el Servicio Meteorológico Nacional predijo 4 a 8 pulgadas de nieve el jueves.

La Interestatal 5 fue cerrada en ambas direcciones en el Grapevine, con conductores hacia el norte que se dieron la vuelta justo después de la salida de Lake Hughes Road en Castaic. Fue cerrado alrededor de las 4:30 a.m. con nieve sustancial cayendo en la carretera. La I-5 en dirección sur reabrió un poco después de la 1:30 p.m. con la Patrulla de Carreteras de California escoltando a los conductores a través del paso. El lado norte reabrió alrededor de las 3:15 p.m.

Se aconsejó a los conductores evitar la autopista 14 en el Valle del Antílope, donde también había nieve en la carretera.

Se esperaba que el área metropolitana de Los Angeles llegara entre 1,5 y 2 pulgadas de lluvia el Día de Acción de Gracias. Una advertencia de inundación estuvo en vigor hasta las 10 p.m. del jueves en el Condado de Orange, para Huntington Beach, Costa Mesa, Newport Beach, Laguna Beach y San Clemente.

Una advertencia de tormenta invernal que significa una expectativa de difíciles condiciones de viaje estará en vigor para las montañas del condado de Los Angeles hasta las 4 a.m. del viernes.

La autopista Interestatal 5 fue cerrada en la mañana del  jueves, en la zona de Grapevine desde la salida Parker Road debido a la nieve que cayó en la madrugada. A las 2:51 p.m. Caltrans informó que la parte norte fue reabierta, después de 10 horas, y que los vehículos serían escoltados por la Patrulla de Caminos de California para evitar accidentes, informó Caltrans. Foto: SCV Sheriff

“Habrá algunas lluvias persistentes el viernes y hará frío, pero las duchas comenzarán a reducirse el viernes por la mañana.

El nivel de nieve bajará a 2,500-3,000 pies el jueves por la noche, según el servicio meteorológico.

“Viajar podría ser muy difícil y a veces imposible”, advirtió el servicio meteorológico. “Las condiciones peligrosas podrían dar lugar a cierres temporales de carreteras”.

Mientras tanto, las temperaturas eran inusualmente heladas a través del sur californiano.  El máximo del jueves en el centro de Los Angeles fue de 56, con 58 pronósticos  para el viernes. No había tan bajas temperaruras desde hace  38 años en Palmdale y Lancaster, 50 en Santa Clarita, 54 en Woodland Hills y Pasadena y 55 en Anaheim.

La tormenta llevó a los funcionarios de la ciudad y del condado de Los Angeles a abrir sus refugios las 24 horas para que los sin techo escaparan del frío y la lluvia. Más de 500 nuevas camas de refugio de emergencia se abrieron el miércoles en Los Angeles, y otros cientos el jueves y viernes. En todo el condado, la Junta de Supervisores votó a favor de abrir siete refugios temprano, todos ellos para el viernes.