Monterrey, NL.

No deja de intrigarme el hecho de que haya contactos que ponen las “perdidas” del ejercito ruso en Ucrania, como si eso fuera un exorcismo que logrará desalojar a dicho ejercito de dicho país.
Lo lamentable es que pareciera que hay gente que no aprendió del pasado. Durante la guerra de Vietnam, el sistema de propaganda estadounidense se dedicó a hacer lo mismo, poniendo la cantidad de perdidas del ejercito de Vietnam del norte tanto en material bélico como en vidas humanas, junto con sus colegas del Viet Cong, los guerrilleros de Vietnam del sur.
Y no sirvió de nada. Mientras los EUA no empujaron a dicho ejercito fuera de las fronteras de Vietnam del sur, la derrota estadounidense era algo ya aceptado por todos los círculos gubernamentales en el país de Norteamérica.
Al final, los estadounidenses tuvieron pérdidas humanas de alrededor de 58 mil personas. Los vietnamitas, de alrededor de 2 millones de personas (más menos un millón). Y ni eso los detuvo, que era a lo que apostaban los estadounidenses.
Hoy, en Ucrania, olvidan que los rusos (o, mejor dicho, los soviéticos), tuvieron la mayor cantidad de perdidas en vidas humanas de todas las naciones involucradas en la segunda guerra mundial: alrededor de 25 millones de personas. Los estadounidenses, tuvieron solo alrededor de 2 millones, por poner un ejemplo. Pero esas perdidas hicieron más implacables a los rusos (perdón, a los soviéticos).
Lo interesante es que los medios no mencionan que los ucranianos ya aceptaron tener perdidas (o bajas) de alrededor de 1 mil personas por día, entre 200 muertos y 800 heridos. Ya haciendo cálculos, resulta que, en todos los días de guerra, ya se comprometió prácticamente a la mitad del ejercito regular (y profesional) de Ucrania. Y eso se ve en los resultados de las batallas. Los ucranianos presumen ganar terreno, y, así como los EUA pudo levantarse en la segunda guerra mundial con la foto del izamiento de la bandera en Iwo Jima; copian el mismo modelo mostrando cómo izan su bandera en un pueblo. Solo que, ese pueblo, ya estaba en manos de ellos.
Lo dije y lo seguiré diciendo: el peor error de los EUA, y de los europeos, fue no haber entrado con sus soldados profesionales desde el primer día de combate. Tuvieron miedo al oso ruso, y van a pagar la factura. Porque muchos de los soldados ucranianos en este momento son improvisados, y no pueden, o saben, manejar las armas occidentales.
Hubo una alharaca hace unos días porque supuestamente los ucranianos destruyeron un puente con el cual los rusos se aprovisionaban. Los rusos mostraron como los famosos cohetes estadounidenses utilizados, fallaron el blanco o no hicieron mella en el objetivo.
Yo sigo viendo propaganda occidental por todos lados, pero regreso a ver los mapas del conflicto, y algo me queda claro: los ucranianos no han podido echar para atrás a los rusos. En lo más mínimo.
Pero, acusan a los rusos de ser “represivos”, sobre todo a su presidente. Pero resulta que no se pueden compartir a los medios rusos en Occidente, porque están “boicoteados”. Los que sí podemos verlos, por estar en naciones verdaderamente neutrales, y podemos comparar los dos lados de la moneda, llegamos a la misma conclusión: los rusos ya confirmaron que están peleando contra neonazis. Y todos los rusos escucharon de boca de sus padres o de sus abuelos los desmanes que los nazis originales hicieron en su país, cuando lo invadieron en los 40. Así que muy pocos, en este momento, se atreven a manifestarse en contra de la guerra. Porque saben que no solo la OTAN les mintió cuando les prometió no expandirse. Ahora, ven con temor que se expanden, siendo aliados de neonazis.
A los ucranianos les urgía demostrar “resultados”. El Pentágono está muy molesto por la “perdida” de equipos militares que han sido enviados. Los europeos se están quedando sin armas en sus almacenes por enviarlos a Ucrania. Y ya los checos, y ahora los italianos, están protestando por la falta de energéticos rusos y por no hallarle sentido a seguir apoyando a los ucranianos. Vamos, ya hasta un general estadounidense comentó que los ucranianos tienen que aceptar la derrota.
Los rusos, mientras, no se despeinan. Saben que, en este momento, deben de destruir todo lo que los ucranianos utilicen en su “ofensiva”, con lo cual, en unas cuantas semanas más, podrán utilizar a su mejor aliado: el general invierno. Un general que nunca les ha fallado en el pasado, desde la era napoleónica, cuando Occidente también intentó hacerse de su país.
Con el ejercito ucraniano mermado, y los europeos sin energéticos, los rusos saben que están formando la ecuación para la “tormenta perfecta” y así poder salir victoriosos. Y las ultimas maniobras que hicieron con otros países, solo fue para demostrar que sus almacenes siguen pletóricos de armas, y que no se están quedando “cortos” en material bélico, como los propagandistas occidentales quieren hacer creer.
Por último, algo que muchos que apoyan a Ucrania no van a poder entender: el motivo por el cual muchos, sobre todo en América latina, “apoyan” a un “sádico dictador” como Putin. Y es simplemente porque hemos visto como la OTAN ha continuado con una política belicista en muchas partes del mundo, y como se llevaba el riesgo de que terminará siendo un “ejercito supranacional” que, de no ser por las armas rusas y chinas, hubiesen permitido que se hicieran del control de muchos países que les “estorban” en sus planes para dominar los mercados mundiales.
Después de todo, la animadversión de los europeos hacia los rusos y los chinos no fue gratuita. Y muchos países latinoamericanos, dependen del armamento ruso (y chino), precisamente, para poder seguir defendiendo su soberanía.
En fin. Mientras Occidente llena los medios con palabras, los rusos siguen dominando el terreno. Y, al final, eso es lo que gana una guerra: dominar el terreno. Porque si hubiera sido a base de propaganda, los nazis hubieran ganado la segunda guerra mundial.