Monterrey, N.L. 

El Quinto Informe de Gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador demuestra en los hechos que sus tesis económicas y políticas de la Economía Moral y del Humanismo Mexicano, son fundamentales para lograra el Desarrollo y Bienestar del país que 36 años de políticas Neoliberales habían impedido.

Economía, Política y Naturaleza

Una síntesis de los logros alcanzados fueron mencionado por la Secretaria de Gobernación, Luisa María Alcalde, al llevar el día primero de septiembre a senadores y diputados del Poder Legislativo del país, el documento del citado informe, mismo que el Presidente leyó ante el pueblo de Campeche ese mismo día; sin embargo, en la apretada pero brillante síntesis de Luisa María,  no fue mencionado el rubro “Medio Ambiente” como otro de los grandes logros en sus cuidados, por parte del gobierno de la Cuarta Transformación (4T), realidad explicada en el citado documento que leyó el presidente, pero, que ante los grandes procesos que se enfrenta la humanidad, como es el Consumismo que impulsa el sistema capitalista y su correlato del Cambio Climático, implica ya no sólo de cuidados ambientales que se han venido planteando y haciendo, sino el de reconocer qué tanto tenemos que crecer económicamente para satisfacer nuestra necesidades básicas como seres humanos y con qué tantos recursos naturales contamos para ello, como país. He ahí la necesidad de conformar, mediante el desarrollo del movimiento de la 4T, la realidad sostenible como país, con responsabilidad ante nuestro pueblo y del planeta que habitamos.

Si bien las condiciones materiales de existencia  en estos últimos cinco años de la 4T nos brindan que más de cinco millones de compatriotas salgan de la pobreza; que haya crecido el empleo; incrementado el salario real; que se inyecten a la economía 60 mil millones de dólares por los mexicanos en el extranjero al final de este año; un peso fuerte; caída de la inflación; que más de 30 millones de familias tengan al menos un programa de bienestar y que si en 2018 al llegar AMLO al poder, se disponía de 500 mil millones de pesos en programas sociales para nuestro pueblo, hoy, en 2023 se invertirán mil millones de pesos para el bienestar de los mexicanos, atacando así la pobreza, la desigualdad y las causas del delito para poder alcanzar la paz social que todos deseamos y nos merecemos, realidad manifiesta en la caída de las estadísticas de los delitos del fuero común y federal.

Todo ello ha creado una verdadera Revolución de las Conciencias, una contundente lucha contra la corrupción y así, ir establecido ya las condiciones para defender los logros alcanzado por las movilizaciones y luchas de ese Pueblo Sabio que habla López Obrador; sin embargo, hace falta que además de ir obteniendo los logros económicos y políticos que implica ese proceso revolucionario de la 4T, y los respectivos cuidados del Medio Ambiente que por el momento se han ido alcanzando, ha llegado la hora de reconocer que tenemos que establecer un país sostenible, ambientalmente hablando.

La Sostenibilidad, es ya una lucha mundial

Esta preocupación de la sostenibilidad, muy bien México puede también ser innovador en ello, como lo ha demostrado con éxito al enfrentar la crisis económica del capitalismo mundial, la lucha contra el COVID 19, los efectos de la guerra de Ucrania y Rusia, un ejemplo de políticas económicas con esa manera de ejercer desde el poder del Estado al controlar la Renta Nacional, bajo eso que el gobierno de la 4T ha llamado Economía Moral, donde los pobres son primero (teniendo como referente histórico el Programa del Partido Liberal Mexicano de 1906) y donde el Humanismo Mexicano que señala el presidente AMLO, emanado de los próceres de la Patria, es toda una máxima filosófica del buen proceder de la revolución pacífica que vivimos. Igualmente, todo ello, es necesario que este operar del gobierno con nuestros ecosistemas, sus límites y procederes, se implemente más a fondo en los próximos 13 mees que aún queda de gobierno de AMLO y en los nuevos desarrollos del gobierno que venga, ya que Morena lleva delantera para seguir en el poder político del país.

Esta realidad de valorar los bienes y servicios de la Naturaleza e interactuar con ello en una óptica de sostenibilidad, empieza a ser una realidad mundial de los pueblos del mundo, por ejemplo el teólogo brasileño, Leonardo Boff, en su reciente publicación “El consumismo amenaza los límites sostenibles de la Tierra” (Voces: 2/9/2023) afirma lo siguiente: “El hecho es que se ha creado la cultura del capital. La mayoría de los productos (televisores, automóviles, electrodomésticos, ropa, zapatillas y un sinfín de artículos más) caen en obsolescencia, hechos para durar un tiempo determinado, lo que obliga al consumidor a reemplazar, comprar y consumir”. Esta realidad ha creado que: “La Tierra, Súper Entidad sistémica y viva, al no darnos lo que pedimos, responde con más calentamiento, más eventos extremos, más diezmaciones de la biodiversidad y más virus dañinos e incluso letales. Toda la relación se define en la articulación entre biocapacidad y huella ecológica. Biocapacidad significa la capacidad de la naturaleza para ser resiliente y autorregenerarse. La huella ecológica nos dice cuánta biocapacidad calienta esa región o país. Cuanto más compleja es la región, con ciudades, población e industrias, más recursos naturales requiere”.

Agregado Boff al respecto: “En este momento, tan malo como el aumento del calentamiento global es el rápido sobregiro de la Tierra. Nuestro modo de vida se está quedando sin suministros de bienes y servicios necesarios para la vida. Es urgente cambiar nuestro estilo de consumo volviéndolo sobrio, solidario y autolimitado. XI Jinping propuso el ideal de una ‘sociedad suficientemente abastecida’ para toda China. Debemos aprender a vivir con lo suficiente y digno, reducir el consumo energético y buscar medios de transporte alternativos y menos contaminantes. Si no hacemos este acuerdo entre todos, nuestra existencia en este planeta será miserable e incluso imposible”.

Ciencia, tecnología y movilización popular

A llegado el momento en que como país pasemos a considerar seriamente nuestras demandas y capacidades como población por la fuerza de la ciencia y la tecnología y de la movilización popular, para establecer las nuevas relaciones de producción, distribución, intercambio y consumo que nuestro pueblo necesita y no, bajo los criterios consumistas del mercado que unos cuantos han ido creando y convirtiendo en mercancías los bienes y servicios que la Naturaleza nos brinda. Excelente el referente del Quinto Informe de “No al maíz transgénico” y protección de nuestros maíces, pero ¿Qué necesitamos para ya no importa maíz blanco o amarillo? O, no basta el establecer presas y acueductos para seguir extrayendo más aguas de las fuentes naturales, sino ¿Qué se necesita para eliminar la práctica del extractivismo y pasar a la producción, conjuntamente con la Madre Naturaleza del vital líquido? todo ello sin recurrir a la geoingeniería como ha sido entre otras cuestiones el provocar lluvias con químicos o seguir haciendo más pozos y hasta más profundos.

Desarrollo, Bienestar o Colapso

Por lo tanto, ha llegado la hora de ya no seguir la partitura para no respetar los límites que nos brinda la Naturaleza, para ya no seguir comiéndonos las Áreas Naturales Protegidas, para contratar geólogos y geógrafos, preguntarnos: Sí el Desarrollo y Bienestar que queremos seguir alcanzando ¿Hay Naturaleza para lograrlo? Esta es una arista que el desarrollo de la Revolución de la 4T tendrá que ir estudiando y tomando medidas al respecto por el bien del Pueblo de México y de la Madre Naturaleza, de lo contario, todo lo avanzado se colapsará ¡Órale!