Monterrey, N.L.

“Si vis pacem para bellum” (Si quieres paz, prepárate para la guerra). Antiguo adagio romano.
En este momento, hay una controversia por una canción de una película infantil, donde supuestamente acusan de “promover el acoso” al autor de la canción, un afamado actor estadounidense.
Al mismo tiempo, un estudio del pentágono indica que hasta el 77% de los jóvenes estadounidenses no son aptos para el servicio militar.
¿Por qué deberíamos de poner atención a lo anterior? Por algo muy simple: desde los 90, los EUA quiere que México ingrese como miembro de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN). Y en las últimas fechas, he visto más noticias sobre el tema, donde ahora hasta la misma OTAN, vía su secretario general; ha “coqueteado” con el tema, lanzando mensajes a nuestro país en el sentido de que ingresar a su organización, sería algo bien visto por el resto de los miembros.
Sé que no van a faltar los acelerados que “piensen” que lo anterior es algo “benéfico” para nuestro país. Pero sé también que no han leído entre líneas lo que acabo de escribir. Si los EUA no tiene a jóvenes capaces para poder ir a la guerra ¿quién le queda para poder hacerlo?
Ahora, sí no hubiese riesgo de una guerra inminente, podríamos decir que valdría la pena “analizar” la situación. Pero seamos realistas: muchos se preguntan no si va a haber guerra entre los EUA y las potencias asiáticas antagonistas. No. La pregunta es CUÁNDO va a estallar dicho conflicto. Conflicto que, si somos parte de la OTAN, nos va a absorber inexorablemente.
Por otro lado ¿qué beneficios reales podríamos obtener al hacernos miembros de la OTAN? Porque sinceramente, yo no veo ninguno. Si me dicen “relaciones comerciales”, pues: México es el país con más tratados comerciales en todo el mundo. Eso implica a nuestros socios de América del Norte, y a la Unión Europea. Porque la posición geográfica privilegiada de nuestro país, entre la ya mencionada América del Norte y América del Sur, así como entre el Lejano Oriente y Europa y África por el otro lado; nos da la prerrogativa de poder tener un amplio comercio. De hecho, México busca extender sus relaciones comerciales en este momento precisamente, con las dos potencias asiáticas antagonistas a la OTAN. Y no es un movimiento a la ligera. Una de esas dos potencias está a punto de entrar a la guerra con los EUA precisamente para establecer, según el principio de Tucídides, cuál de los dos países será la nación hegemónica del siglo 21.
Así que ¿qué resta? ¿Qué los mexicanos puedan pasar a los EUA sólo con el pasaporte, sin necesidad de visa? Dudo que los EUA quiera establecer una especie de “Unión de Norteamérica”, imitando a la Unión Europea. El visado obligatorio para entrar a los EUA entró en vigor en 1929. Y, a casi un siglo de ser establecido, no tiene pinta de que los EUA lo retiré para países sin población de origen europeo, como lo hace (no pedir visa) con Canadá, Australia o la ya mencionada Unión Europea. De hecho, el único país de América latina que llegó a gozar de esa prerrogativa fue la Argentina. Pero sus eternas crisis económicas, provocaron que a los argentinos les volvieran a exigir visado por parte de las autoridades estadounidenses.
Además, la tendencia a que disminuya el flujo de mexicanos que van a trabajar a los EUA está disminuyendo. Y esa tendencia se aceleró a partir, primero, de la pandemia. Pero segundo, a partir de la mejora del poder adquisitivo del salario y la disminución del desempleo en el actual régimen. Ahora se ve un flujo contrario: estadounidenses jubilados que acuden a México para establecerse, debido a que sus pensiones les rinden más en nuestro país. De hecho, alguien mencionaba que “con AMLO los ricos se hicieron más ricos”. Olvida un simple silogismo. La propaganda neoliberal afirmaba que con dicho sistema “la riqueza producida por los de arriba en el estrato económico iba a permear a los estratos inferiores”. Pero resultó ser una falacia. Lo que en realidad sucede, es que el aumento del poder adquisitivo permite aumentar el consumo. Y, con el aumento del consumo, aumentan las utilidades de las personas ricas. Un silogismo muy básico y simple.
Y no hallo ninguna otra razón que justificará que México entré a la OTAN. Menos, cuando los tambores de guerra están sonando, y sonando fuerte. Creo que sería el peor error que México pudiera hacer.
Porque los EUA buscaron averiguar hasta donde llegaba el límite de paciencia de las potencias asiáticas al intervenir descaradamente en sus asuntos internos, y extender su área de influencia a las fronteras de dichas potencias. Pero ahora, se encuentra con un dilema. Ya que su “estilo de vida”, aunado a su política de promocionar derechos humanos, ha ocasionado que tenga toda una generación indolente de jóvenes que piensan que los problemas se pueden resolver con “hashtags”, y que obligar a su visión de ser “políticamente correcto” aplica para todo el mundo.
Y esos jóvenes olvidaron algo, en su soberbia de pensar que todo en el pasado fue, como ya comenté, “políticamente incorrecto”. Lo que olvidaron es, sencillamente, que, si la política bloquea al activismo, la guerra definitivamente hace que desaparezca dicho activismo. Porque no hay nada más perjudicial para el esfuerzo bélico que el activismo, porque dicho activismo puede terminar exigiendo que el conflicto termine, al precio que sea. Algo que el estatus quo estadounidense aprendió, a la mala, durante el conflicto que los EUA peleó en Vietnam.
Pero hay algo que menos comprenden: los derechos humanos actuales han progresado mucho, pero mucho, desde el mundo “políticamente incorrecto” de la guerra fría de finales del siglo pasado. Pero pareciera que no están conformes, y quieren más y más derechos, sin ponerse a analizar y a debatir. Y nunca van a comprender, mucho menos aceptar; que, si quieren seguir gozando de esos derechos, que van desde poder desfilar para poder mostrar orgullosamente su “preferencia”, hasta pugnar por cambiar los modelos de mercado, poniendo exponentes de minorías promocionando productos de consumo, pues, con la pena. Pero tienen que aceptar que DEBEN PREPARARSE para la guerra. Porque siempre habrá otras sociedades que no comulguen con esa forma de pensar, y no lo dejen de ver como una situación “decadente”, propia de una “sociedad burguesa”.
Porque si piensan que van a detener tanques, aviones o hasta misiles solo con los ya referidos “hashtags”, y no empuñando las armas, van a perder sus derechos y sus libertades. Y no porque yo personalmente les desee un mal, ni mucho menos. Simplemente, porque no han leído y analizado el devenir histórico de la humanidad.
Y si los EUA, no pone orden en su juventud, esperanzado a utilizar a los jóvenes militares mexicanos para poder defender los “principios democráticos”, espero que no haya muchos en nuestro país que caigan en ese “garlito”.
Un amigo, al comentarle todo lo anterior, me dice: “piensas como derechista”. Solo me sonreí. Le contesté: “Error. Recuerda que el sentido común no es prerrogativa de la derecha”.
Y todo lo comentado aquí, es puro sentido común, aunque a muchos, no les guste.
Así que, mientras Occidente hace un debate inútil sobre una canción en una película infantil, los asiáticos se siguen preparando para “tener paz”. Pero al más puro estilo romano. Porque cuando los romanos lo dejaron de hacer, ya sabemos lo que ocurrió con su imperio.